- El hogar de acogida de menores en situación de desprotección de Sopela trasladará próximamente su ubicación al entorno de las playas, concretamente a un inmueble situado en la avenida Arriatera. El hogar de acogida lleva en marcha un década en la localidad, en la calle Bidebitarte, y está gestionado por la asociación Bizgarri, que presta servicios de atención a niños, niñas y adolescentes en situación de desprotección derivados del servicio de infancia de la Diputación Foral de Bizkaia.

Sin embargo, el cambio de residencia, debido a que el propietario del inmueble donde viven actualmente los menores lo ha puesto a la venta, ha suscitado cierto revuelo en la localidad ante la divulgación de información por parte de un grupo denominado Vecinos de Sopela en la que muestra su oposición a este nuevo emplazamiento.

En este sentido, el comunicado anónimo, publicado en redes sociales y repartido por toda la zona de Arriatera, sostiene que “creará un sentimiento de inseguridad, miedo e intranquilidad para los vecinos, sus casas y negocios”. Además, manifiesta que “la Diputación utiliza los centros residenciales para los menores extranjeros no acompañados porque no tienen sitio”. Asimismo, en el comunicado se indica que el nuevo emplazamiento está situado “pegado a un parque de niños donde los vecinos acuden diariamente” y que “salen solos de la playa durante todo el día, incluyendo la noche, y que esto convertirá Arriatera y Larrabasterra en una zona insegura”.

Por su parte, el alcalde de Sopela, Josu Landaluze, quiso salir ayer al paso de estas afirmaciones que calificó de “falsas” y, tras reunir a la junta de portavoces municipal para abordar el asunto, desmintió que se vaya a ubicar en la zona “un centro de menores no acompañados”. El regidor explicó que simplemente se trata de un cambio de ubicación del “hogar de acogida para menores en situación de desprotección” que lleva en marcha una década en el municipio.

Al mismo tiempo, Landaluze destacó que estos menores “nunca han dado problemas” y que están “plenamente integrados”. “Están escolarizados en los centros de Zipiriñe e Iberre y acuden a las diversas instalaciones municipales al formar parte de asociaciones y clubes locales”. En total, se trata de una decena de menores, procedentes de familias desestructuradas, algunos de los cuales llegaron al pueblo “con 13 meses de vida” y, actualmente, tienen “una media de 10 años de edad”, apuntó.

Sobre esta línea, el regidor expuso que la Mancomunidad de Uribe Kosta valoró la posibilidad de arrendar el inmueble para refugiados ucranianos, pero que finalmente por razones de “temporalidad” no se llevó a cabo y ha sido arrendado por Bizgarri.

El regidor se reunió el pasado día 4 “con los vecinos de la zona de Arriatera” para explicarles el cambio de ubicación y aclararles que no se trata de menores no acompañados, sino que cuentan “en todo momento con la tutela de educadores”.

Por otra parte, el principal grupo de la oposición en el Ayuntamiento de Sopela, EH Bildu, ha salido también al paso de los comentarios vertidos en el comunicado distribuido por el pueblo. “Ante la campaña impulsada por el grupo autodenominado Vecinos de Sopela en la que muestra su oposición a un nuevo centro de acogida de menores en Arriatera, EH Bildu quiere mostrar su total repulsa e indignación. El comunicado incita al odio, es racista, clasista y criminaliza a niños, niñas y adolescentes que necesitan toda la protección incondicional de nuestro pueblo”, señalan. De igual modo muestran su “apoyo a la asociación Bizgarri” y proponen que sea convocada “una concentración de repulsa a esta campaña”. l