Después de disfrutar de una intensa ruta en bicicleta por el monte, bidegorri o carretera no hay mejor manera para acabar el itinerario que dejando limpio el vehículo para la próxima ocasión y evitar así manchar el trastero, garaje o casa. De esta manera, los aficionados a la bicicleta de Berango están de enhorabuena puesto que el Ayuntamiento de la localidad ha instalado recientemente un lavadero público de bicicletas en la calle Sabino Arana, frente al supermercado Eroski.

El nuevo equipamiento, construido a lo largo de este pasado mes de agosto y que ha contado con un presupuesto de cerca de 11.000 euros, dispone de espacio para tres vehículos de dos ruedas al mismo tiempo, con tres portabicicletas a modo de soporte y tres mangueras enrollables conectadas a tres grifos con manilla para el control del caudal.

“La manguera tiene bastante potencia y limpia muy bien la bicicleta. Es un servicio muy útil para el pueblo”, señala el berangotarra Jon García, que durante su travesía por el bidegorri que conecta Getxo-Berango-Sopela hizo un alto en el camino y aprovechó para sacar brillo a su bicicleta antes de regresar a casa.

Y es que la afición al ciclismo está muy arraigada en Berango. El municipio cuenta con numerosos adeptos a la bicicleta e incluso un equipo, Elkar Kirolak, donde se forman promesas de este deporte. “La instalación de este servicio fue una propuesta del entorno del equipo ciclista y nos pareció muy buena idea porque en Berango el ciclismo tiene mucha importancia”, resalta la alcaldesa de la localidad, Anabel Landa.

En este sentido, la localización del lavadero, frente al supermercado en paralelo a las vías del tren, junto a la red de bidegorri que conecta con Sopela, ha tenido “muy buena acogida” por parte de la ciudadanía, según Landa. “Se ha ubicado en un terreno municipal, muy céntrico y próximo al bidegorri, y al mismo tiempo no crea inconvenientes a nadie”, prosigue.

Por último, desde el Ayuntamiento de Berango se solicita a la ciudadanía que cuide de este nuevo equipamiento público y se haga un uso exclusivo para el lavado de bicicletas, así como una vez terminado el servicio se deje el grifo cerrado y la manguera enrollada en el soporte. También se apela a que se deje la zona de uso limpia y se utilice el agua con moderación.