Son las 11.30 horas de la mañana y la Plaza del Gas, donde se realiza el taller de arcilla y aquafonía, se está llenando poco a poco de vecinos. "Os vamos a dar una pastilla a cada uno y os voy a ir explicando poco a poco el proceso a seguir para elaborar un cuenco", anima el artesano de Bilboko Konpartsak a los participantes. Mucha atención, ganas y dos técnicas es lo que hace falta: primero hay que formar una bola y, luego, hay que darle forma de cuenco. Posteriormente hay que aplicar la técnica del colombín: formar un churro extenso con la arcilla e ir sobreponiéndolo hasta crear la figura final.

Tras más de año y medio de pandemia y de una Aste Nagusia suspendida por la situación sanitaria, los talleres organizados por Bilboko Konpartsak han salido a la calle para revivir Bilbao desde hoy hasta el 29 de agosto. Las actividades las ofrecen para que los vecinos puedan evadirse, realizar algo práctico y aprender con el procedimiento.

"Usamos lo que caracteriza a Bilboko Konpartsak que es la fiesta y la risa, y como no podemos hacer fiestas hemos querido, con esta semana cultural, empezar a sonreír de alguna forma para salir un poco de lo que traemos a nuestras espaldas: la pandemia. Las actividades son todas al aire libre, gratuitas y pensadas para el pueblo. Creemos que con estos talleres la ciudadanía se ve más cómoda y es un medio para evadirse, ya que venimos de un año y medio de confinamiento y la gente tiene ganas de hacer algo, salir de esta rutina y de hacer cosas que nos traigan de vuelta la normalidad", explica Arkaitz Peña, miembro de Bilboko Konpartsak.

Las comparsas se han movilizado desde las 9.00 horas de la mañana de hoy partiendo desde el Casco Viejo para regalar sonrisas a los vecinos en distintos puntos de la villa con un maratón de las radios de Bilbao, una movilización musical en pro de la cultura popular, cuentos para trabajar la autoestima, talleres de arcilla y aquafonía, un BingoTxou y a las 19.00 horas llevarán a cabo una movilización musical en pro de la cultura popular.

"Es importante realizar actividades culturales". Así lo considera Mercedes Pérez, una de las participantes del taller de arcilla. Sin soltar su cuenco y sin dejar de trabajar en él, asegura que ya tiene pensado participar en alguna actividad más. "Jamás he trabajado con la arcilla y saber cómo funciona es interesante. Yo he venido porque quería probar algo diferente y bonito. Además, nos están tratando estupendamente y les debemos mucho, están haciendo un esfuerzo muy grande las comparsas", reconoce.

Por ello, no entiende el por qué no se han permitido otras de las que estaban previstas. "Ha sido desmesurada la medida adoptada. Estoy cabreada porque se han prohibido muchos talleres sin sentido cuando se está cumpliendo con los protocolos de seguridad. Estas actividades dan vida a la villa después de un año tan duro y se deberían permitir más", ha añadido.

SALIR DE LA RUTINA

Peña, por su parte, ha explicado que las actividades están muy acotadas y tienen una entrada y una salida muy delimitada: "Los participantes han tenido que mandar previamente los contactos e inscribirse para hacer un seguimiento covid-19 en el caso de que fuera necesario. El taller de barro es para 30 personas y de momento se han preinscrito las 30, son las que están participando, no va a haber aglomeraciones porque los que participan son los que están apuntados. Además, hemos organizado todo para que haya distancia de seguridad entre las personas".

Entre los participantes se encontraba un grupo de adultos que han llegado a la Plaza del Gas con intención de salir de la rutina. "Hoy que hace un día buenísimo apetece", comentaba uno de ellos, mientras que otra de las vecinas defendía la necesidad de este tipo de actividades: "Son talleres que se pueden hacer bien, también sirven para recordar que existen las fiestas de Bilbao y que se puede hacer algo diferente adaptado a la situación actual".

La vecina muestra su descontento hacia el Consistorio y apunta que no le parece bien la prohición de ciertos talleres porque "las medidas se iban a cumplir bien y estaban preparadas para ello". "Prohibirlas es poner límites y obstáculos a las actividades culturales. El hecho de que algunas se están realizando es un ejemplo de que se pueden hacer siguiendo unas medidas preventivas", ha matizado. "Por ello, nuestro objetivo es acudir a las que podamos y participar en ellas para promover este tipo de ocio alternativo".