Bilbao - La presencia ayer en la capital vizcaina del presidente de Air France-KLM para España y Portugal da fe de la importancia que tiene para el grupo aéreo galo el aeropuerto de Bilbao. Boris Darceaux dio a conocer la fuerte apuesta de la aerolínea para la recién iniciada temporada de verano aérea.

Tres son sus pilares. El fuerte incremento de la oferta en sus vuelos con el aeropuerto Charles de Gaulle, en París; el cambio de terminal donde aterrizarán los pasajeros, lo que permitirá unas conexiones mucho más rápidas y fluidas con todos los enlaces que la aerolínea tiene con el resto del mundo, y el posicionamiento en La Paloma de aviones más grandes para cubrir las tres frecuencias diarias entre ambos.

El responsable de la aerolínea gala aseguró que Bilbao “cada vez atrae a más gente” y acoge eventos como las finales de rugby por clubes del año pasado o la Eurocopa 2020 y esa “es una de las razones por las que invertimos y ponemos aviones más grandes”.

El directivo del grupo dio también una buena noticia de que de cara al próximo invierno, cuando Air France mantendrá la nueva operativa, lo que supondrá un 35% más de oferta con respecto al año anterior desde la terminal de Loiu.

Desde el pasado 31 de marzo, la compañía de bandera gala ha incrementado su frecuencia de vuelos a París desde y hacia el aeropuerto de Bilbao en un 30% lo que supone que hayan puesto ya a la venta 150.000 plazas disponibles.

La evolución de esta operativa aérea se ha efectuado gracias a la introducción en la ruta de los aviones Airbus A318, que sustituyen a los pequeños Embraer. Estas aeronaves con las que operaba hasta ahora la aerolínea gala disponían de 76 y 100 plazas operando con HOP, la filial regional de la compañía. El paso ahora a la flota de Airbus A318 de la propia aerolínea Air France supondrá incrementar la capacidad disponible hasta los 126 pasajeros por vuelo, lo que supone disponer de un 35% más de asientos.

Junto con KLM, que inauguró su ruta entre Bilbao y Ámsterdam en mayo de 2014, Air France ofrecerá este verano hasta 84 vuelos semanales para conectar la capital vasca con París y la ciudad holandesa. El responsable del grupo en la península señaló que los primeros resultados tras el aumento de la oferta han sido “muy positivos” en términos de reservas, acordes con el citado aumento de su capacidad.

Además del paso a los Airbus, Air France traslada las llegadas a la terminal 2F del aeropuerto parisino, lo que supondrá, en palabras de Darceaux “una conectividad más ágil para los clientes de la compañía, que ahora llegan a la terminal 2G”.

Durante la presentación Darceaux explicó que “al cumplirse 19 años de la llegada de Air France a Bilbao, es una satisfacción para nosotros reiterar nuestra apuesta por esta región porque nuestra ruta desde Bilbao está teniendo unos resultados muy positivos”.