Basauri - Recientemente acaba de subirse al podio en el Campeonato de España Absoluto de taekwondo, en el que ha representado a Euskadi. Zuriñe Padilla es ya una realidad en este deporte y el futuro que tiene por delante es prometedor. A sus 21 años, esta basauritarra ha logrado, con la última medalla de bronce conseguida en el campeonato, su cuarta medalla en la categoría y diez en total dentro de las diferentes categorías en campeonatos de España; 4 senior, 4 sub-21 y 2 junior.

Pero su palmarés va más allá de esos impresionantes resultados deportivos, ya que cuenta también con una plata en los Juegos Europeos Universitarios (2016), otra plata en el Europeo Universitario (2017), etc.

Con el buen sabor de boca que le ha dejado el último bronce, ya tiene varios objetivos en mente. Sobre todo dos para esta temporada: “el Campeonato de España Universitario y el de Europa Universitario”. En ambos va a ir a por todas, ya que “quiero conseguir el máximo”, asegura Padilla.

A pesar de su corta edad, podría decirse que esta joven lleva toda su vida dentro de este apasionante deporte. A los nueve años comenzó a practicar taekwondo, que le ha cautivado desde que lo conoció. Tal y como recuerda ella misma, “a mi alrededor no había nadie que practicase taekwondo y empecé un poco por casualidad, ya que mis padres se lo ofrecieron a mi hermana y la que quiso probar fui yo”.

En cuanto a las artes marciales, solo ha probado esta disciplina, y a día de hoy, además, le gusta subir al monte “siempre que tengo tiempo”. Y es que el nivel al que esta compitiendo la basauritarra le obliga a tomárselo muy en serio, por eso dedica una hora y media los lunes, miércoles y viernes y, “si está cerca el nacional, el sábado entrenamos con la selección dos horas”.

Pero es que además, “los martes, jueves y sábados voy al gimnasio a hacer la tabla correspondiente, donde estoy entre dos horas y dos horas y media por sesión”, cuenta. Tal y como narra Padilla, “dentro del taekwondo hay dos modalidades; poomsae y combate. Que una persona se introduzca en este deporte no implica que automáticamente se tenga que decantar por una modalidad ya que se puede hacer taekwondo general, ambos tipos o dedicarle más tiempo a uno sola”.

En su caso, la modalidad que practica cuando sale a competir es el combate. Se trata de un deporte duro, aunque durante estos años “solo he tenido dos lesiones con las que me haya asustado. La primera fue en 2015, a casi dos semanas del nacional absoluto, haciendo combate me dieron en las costillas y me dolía muchísimo, notaba pinchazo hasta al respirar. Era un campeonato muy importante y no quería quedarme sin ir, me vendaron todas las costillas para que el impacto fuera el menor posible y así poder pelear.

La segunda, un problema en el isquio que la tuvo parada una larga temporada. En Basauri entrena en el club The Masters. “En la mayoría de los campeonatos salgo en nombre del club salvo en los nacionales, que compito por Euskadi”, explica. Padilla cree que este tipo de deportes no tienen a veces la visibilidad que debieran en comparación con otros.

Poca visibilidad “El poder vivir de ello es casi ciencia ficción. El taekwondo es un deporte minoritario, pero con unos resultados muy fuertes, sobre todo en los Juegos Olímpicos, lo que parece algo contradictorio. Para poder vivir de este deporte, no sería por los resultados, sino por la dedicación, es decir, montar un gimnasio, o trabajar por cuenta ajena dando clases”, comenta. Sin embargo, asegura que a nivel de Bizkaia “es realmente un deporte con muchísimas licencias. En cambio, pese al gran numero de licencias, competidores tampoco hay tantos. Siempre depende de que con qué se compare, claro”.

Sin embargo no es algo que haya influido en la por ahora meteórica carrera deportiva de Padilla, que cuenta sus participaciones en campeonatos de alto nivel por medallas y combates que hacen pensar que todavía le quedan muchos buenos resultados y logros deportivos que traerse a Basauri.