Uno de los grandes motores de Barakaldo es, sin lugar a dudas, su comercio y hostelería local. Un tejido que hay que poner en valor y al que hay que cuidar y una de las vías para protegerlo es tratar de garantizar el relevo entre emprendedores. Para mostrar que Barakaldo es un lugar propicio para aquellas personas que quieran echar a andar sus proyectos empresariales, la Agencia de Desarrollo Local barakaldarra, Inguralde, organizó una misión comercial en la que se mostraron diez modelos de negocio de éxito en la localidad fabril. Los diez establecimientos que participaron en la iniciativa de ayer participaron anteriormente en el proyecto Protagonistas. “Se trata de experiencias reales y cercanas de comercios que han sabido leer su entorno, reinventarse y aportar desde lo local”, desarrolló David Solla, presidente de Inguralde.
Entre los proyectos participantes en la misión comercial de ayer hay negocios de distinto tipo como carnicerías, peluquerías, tiendas de ropa y de artículos de montaña entre otros. Proyectos empresariales que, en principio, son muy diferentes entre sí, pero de los que pueden aprender muchísimo los unos de los otros y, por qué no, aplicar algunas cuestiones en sus negocios. “Estamos convencidos de que los comercios que se han apuntado a esta Misión Comercial van a descubrir en Barakaldo más de una idea perfectamente aplicable a sus negocios”, reconoció Solla.
Uno de los establecimientos participantes en la misión comercial de ayer fue Izarraitz Montaña. Este negocio de artículos de montaña ubicado en la calle San Juan abrió sus puertas en 2014 y, desde entonces, ha hecho del trato personalizado y la cercanía sus señas de identidad. También ha sabido usar las redes sociales para promocionarse. “Al participar en experiencias como esta iniciativa siempre hablas con otros comerciantes y aprendes cosas. Y si no aprendes, también puedes ver que ellos tienen los mismos problemas que tú tienes. Estas son experiencias muy provechosas”, indicó Carlos Martín, gerente de este negocio barakaldarra.