Las medidas y acciones recogidas en el Plan de Acción Contra el Ruido de Basauri, aprobado ya con carácter inicial y que se encuentra en fase de presentación de alegaciones, no convencen al grupo ecologista local Sagarrak. Reclama mayor voluntad e iniciativas más contundentes para cumplir el objetivo de reducir o mitigar los efectos de la contaminación acústica en el municipio teniendo en cuenta que, a su juicio, el documento “no tiene en cuenta medidas para corregir el aumento de los ruidos provocados por decisiones tomadas desde la última elaboración del Mapa del Ruido.

En este sentido, en el escrito de alegaciones que ha presentado, Sagarrak hace referencia a situaciones actuales o proyectos en ejecución como la ampliación de las frecuencias de los trenes de RENFE y el aumento de la circulación de mercancías por el tendido ferroviario que atraviesa el término municipal, la construcción del apeadero provisional del TAV en San Miguel o las obras del nuevo trazado de la línea 5 del metro.

Mitigar el ruido ferroviario

El grupo ecologista considera, además, “escasas e insuficientes” las medidas correctoras que deben ser implementadas por Adif como es el caso de la instalación de apantallamiento acústico para reducir los niveles de ruido generados por el tránsito ferroviario en la trama urbana. Para atajar esta problemática, el documento declara tres zonas de protección acústica especial - Kareaga Goikoa, en San Miguel y en San Fausto -, pero las acciones en estos entornos “deben ir acompañadas de mejoras de aislamiento de las fachadas de los edificios, incluyendo ventanas y puertas, y que el municipio active fondos de ayudas económicos similares a los programas de instalación de ascensores”, propone Sagarrak.

Tráfico rodado

En cuanto al ruido provocado por el tráfico rodado, el Plan de Acción pone el foco, sobre todo, en la Avenida Aguirre Lehendakari y deja como zonas “no prioritarias” otras como el entorno del parque Bizkotzalde, cuyo proyecto de mejora “promueve más tráfico con vehículos privados y más aparcamientos”, critica Sagarrak al tiempo que lamenta que el documento “no tiene una clara vocación de fomento del uso de la bicicleta o de dotarnos de un bus intraurbano que preste servicios a los basauritarras en sus desplazamientos”. Por ello propone que el nuevo plan vaya “ acompasado y coordinado con el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) por la gran interrelación existente entre ambos y en vistas a criterios de eficacia y eficiencia de los recursos públicos”. 

También pregunta Sagarrak en su escrito de alegaciones acerca de la previsión que hay de dotar de protección acústica el trazado del carril bici paralelo a las vías de ADIF con el objetivo de proteger a los usuarios de esta vía cliclable ante el paso de “trenes de mercancía a escasos metros y con niveles de ruido por encima de los 90 decibelios”.