La del pasado sábado fue una jornada intensa y de fiesta de principio a fin en Sestao con motivo de la celebración de los carnavales de la localidad. Fueron casi 24 horas de constantes actividades con los disfraces como excusa para vibrar, gozar y disfrutar. Pero, por desgracia, la mala conducta de algunas personas hizo también que la imagen de Sestao variase sustancialmente respecto a lo habitual.
Así lo hizo ver el propio Consistorio sestaoarra con una publicación en redes sociales que mostraba, en imágenes, la cantidad de basura que se había arrojado al suelo en zonas tan céntricas como la plaza del Kasko o La Pela, puntos en los que la fiesta fue muy intensa, pero en los que algunos incívicos decidieron que no había mejor papelera que el suelo para depositar los residuos, bolsas y botellas generados a raíz de su actividad festiva. “Así ha amanecido hoy –por el domingo– nuestro pueblo, con calles y jardines llenos de basura. Son imágenes que no nos gustan nada. La fiesta no está reñida con el civismo”, señaló el Consistorio sestaoarra en sus perfiles en redes sociales.
Y es que las imágenes hablan por sí solas. Cuando estaba ya a punto de amanecer y la jornada principal de los carnavales sestaoarras ya había tocado a su fin, pasear por algunas zonas céntricas del municipio era todo un ejercicio de esquivar cristales, bolsas de plástico y botellas, entre otros residuos. Tampoco se libraron las zonas ajardinadas del incivismo ya que de estos puntos verdes los equipos de limpieza tuvieron que sacar una notable cantidad de residuos generados por personas que no se tomaron la mínima molestia de llevar la suciedad generada a los correspondientes cubos de basura.
Los principales perjudicados por la nula conciencia social y limpieza de algunas personas que acudieron a Sestao a disfrutar, a su manera, de los carnavales, fueron los operarios de limpieza, quienes tuvieron que emplearse a fondo durante la jornada del domingo para que, en la medida de lo posible, las calles y rincones de la localidad recuperasen la normalidad y luciesen limpios de cara a la celebración de la última jornada del Carnaval de Sestao, unas celebraciones que desde hace cuatro décadas se celebran ya en plena cuaresma para, de este modo, diferenciarse de otros carnavales como los de Barakaldo, Portugalete y Bilbao, entre otros.
Carnaval de Sestao
Estos actos incívicos fueron la principal nota negativa de un fin de semana que estuvo lleno de fiesta en el municipio. Todo empezó el viernes a la mañana con el desfile del alumnado de los diversos centros educativos de la localidad por las principales calles de Sestao. Ese mismo viernes por la noche, como aperitivo a la gran jornada del sábado, Chimo Bayo ofreció dos horas de concierto y música en la plaza San Pedro, escenario en el que el sábado a mediodía tuvo lugar el Carnaval de mascotas. Ese día por la tarde, se celebró, con la molesta compañía de la lluvia, el gran desfile carnavalero de Sestao, una cita que, más tarde, trasladó la fiesta a la plaza San Pedro y a otros espacios de la localidad. La traca final carnavalera se celebró el tradicional Domingo de Piñata y la quema de Doña Sardina, quien volverá al municipio el año que viene y, ojalá, lo haga ante unos amantes de los carnavales más concienciados con la limpieza de las calles.
