Desde que Leioa Kantika Korala empezó con su partitura en blanco en el año 2000 –es increíble, pero ya está cerca del cuarto de siglo de vida– no ha parado de volar. A todo color. Cada año, un poquito más alto, porque el cielo es el límite. Su nuevo hito, apelotonado entre tantos otros atrás, vuela a kilómetros y kilómetros de distancia, como ha hecho hacia otros rumbos: la agrupación leioaztarra viajará hasta Taiwán a final de mes para participar en el Taipei Internacional Choir Festival. Otro escenario de prestigio para dar luz a este coro juvenil que hace de la originalidad su seña de identidad.
Corea de Sur, China, Israel o México registran la huella sonora, interpretativa y coreográfica del coro del conservatorio municipal de Leioa, que ahora, se dispone a deslumbrar en la capital taiwanesa, del 26 de este mes al 4 de agosto. Sólo otros tres coros de todo el globo han sido seleccionados para poner voz rítmica a este evento: Batavia Madrigal Singers, de Indonesia, Cantemus Mixed Choir, de Hungría y Cantus, de Noruega. Y allí, en la otra punta del mapa, Kantika hará lo de siempre y como nunca: sorprender, huir del guión que se le presupone a un coro juvenil, quitarse complejos, innovar, derrochar energía, tirar de creatividad... Volar... Y hasta atreverse con una canción ¡en mandarín! La agrupación está trabajando en las distintas propuestas que mostrará con la intención de ofrecer varios programas musicales de diferentes épocas y estilos. Eso sí, asomará en el escenario el día 1 Basque Soul, una selección de repertorio coral de autores vascos, con obras de Xabier Sarasola, Junkal Guerrero, David Azurza, Eva Ugalde o Josu Elberdin, entre otros. Es precisamente este último quien ha adaptado especialmente para Kantika la pieza Diu Diu Dang, de folklore taiwanés, y con la que el coro cerrará su intervención cantando en mandarín, como gesto de agradecimiento al público. Un desafío para unos jóvenes que no se arrugan.
El periplo de Leioa Kantika Korala contará, en global, con siete conciertos en diferentes lugares de la isla. El coro visitará Nankang, Yi-Lan, Kaohsiung o Chiayi y actuará en dos ocasiones en la gran sala de conciertos Taipei National Concert Hall, conocida mundialmente por su acústica. Y hay más: Leioa Kantika Korala impartirá masterclass y ensayos abiertos a los directores para completar una experiencia al alcance de muy pocos.
Un 2023 asombroso
Será, por lo tanto, un verano para enmarcar, para añadir a esa partitura triunfal que acumula años de giros superlativos. El año 2023 fue soberbio. Leioa Kantika Korala se desplazó en abril a Estambul para acudir al certamen mundial de canto World Symposium on Choral Music. En este caso, solamente asistían diez coros tras un riguroso proceso de selección a ciegas entre 72 candidaturas de todo el mundo. Esta cita es considerada la Champions del mundo de la música coral y ahí jugó Leioa Kantika Korala, que, de hecho, ya había conseguido clasificarse en 2014, lo que da muestra del nivel de esta agrupación integrada por medio centenar de jóvenes de 11 a 20 años y que tiene a Basilio Astúlez como director.
Y 2023 ya arrancó de forma extraordinaria con Galerna, azken bidaia, su primera incursión en el terreno de la ópera. Esta obra parte de la galerna que en 1912 provocó que 143 marineros fallecieran cuando se encontraban faenando a 45 millas de Matxitxako. Y rebobinando más: en 2021, Leioa Kantika Korala regresó en noviembre de Avilés con el primer premio de su Certamen Coral Nacional, uno de los más prestigiosos a nivel estatal. Desde luego, se podría continuar con la retrospectiva, pero no es de extrañar que el futuro aún sea mejor.
