Naroa García es otra de las jóvenes vizcainas que acudirán a las fiestas de los distintos municipios durante el verano.
¿Qué tipo de impacto positivo cree que tienen las medidas de prevención de agresiones sexistas puestas en marcha por los municipios?
Creo que son medidas muy necesarias y positivas para todas nosotras, sobre todo en estos momentos. Nos ofrecen muchas ventajas y ayudas como, por ejemplo, convertir todo el entorno de las fiestas en un sitio mucho más seguro y en el que los chicos sean conscientes de los problemas de la violencia de género. Sobre todo creo que lanza un mensaje de que en las fiestas no se toleran ciertos comportamientos y eso creo que puede ayudar.
¿Cómo le hace sentir que exista un espacio al que puede acudir en caso de una emergencia de este tipo?
Es un gran alivio. Viene muy bien para poder estar tranquila saber que hay personas capacitadas en estos temas que pueden brindarme apoyo en caso de solicitarlo, además de saber y estar segura de que no estoy sola.
En algunos municipios de Bizkaia, como Sopela, además del punto morado, se ha puesto en marcha un servicio para acompañar durante la noche a las mujeres a casa. ¿Qué le parece?
Me parece una muy buena idea. Se suele pensar que el peligro está solo en la fiesta, pero cuando volvemos solas a casa también pasamos miedo. Va a ayudar a que nos sintamos más seguras y, sobre todo, a evitar que vayamos solas y pasemos por zonas en las que nos puedan acosar al ver que estamos indefensas.
¿Qué medidas tomaría para que las fiestas sean más seguras?
Lo más importante creo que es promover campañas de concienciación sobre el respeto y el consentimiento, eso es clave, especialmente en los jóvenes. Reducir las agresiones es muy complicado, pero si todo el mundo es consciente del peligro mejoraría la situación. También más vigilancia y sobre todo aumentar el transporte disponible.