La Iglesia vizcaina ha abierto siete nuevos expedientes por abusos a menores. Entre los agresores identificados hay un sacerdote ya fallecido, un religioso, un sacerdote de otra diócesis y dos laicos. De este modo, desde que se creó en 2019 la Comisión de Protección de Menores y Prevención de Abusos Sexuales de la Diócesis se han incoado un total de 39 expedientes, de los que 27 están cerrados.
Un olivo recuerda desde este viernes en el Seminario de Derio a los menores que sufrieron abusos en la Iglesia. El ejemplar, con una fuerte carga simbólica dentro de la tradición católica, ha sido plantado por el obispo de Bilbao, Joseba Segura, que ha estado acompañado por miembros de la comisión de protección de menores y prevención de abusos sexuales. El obispo, en su intervención, ha señalado que, con este ejemplar, "se quiere rememorar el sufrimiento de las personas víctimas de abusos sexuales en nuestra Iglesia". Junto al olivo, plantado al lado del retoño del Árbol de Gernika, se ha instalado una placa en recuerdo de todas las víctimas.
También el espacio en el que irá creciendo tiene una fuerte simbología. Y es que muchos curas se formaron en el antiguo Seminario de Derio, un lugar en el que, a tenor de la investigación que realizó la Universidad de Deusto, se identificaron casos de abuso sexual cometidos por tres sacerdotes formadores del centro entre 1953 y 1970.
La abogada Gemma Escapa ha intervenido en nombre del equipo dirigido por el presbítero Carlos Olabarri. Según lo dado a conocer, la Comisión abrió siete nuevos expedientes durante el año pasado. Entre los victimarios habría un sacerdote diocesano ya fallecido, un religioso, un sacerdote de otra diócesis, tres laicos, uno de ellos sin identificar, y un último caso abierto, en el que "aún queda pendiente la reunión con la víctima".
39 casos desde 2019
De este modo, desde que se creó la comisión en 2019, y hasta el ejercicio pasado, se han abierto un total de 39 expedientes de los cuales un total de 27 están cerrados.
En el acto de la plantación del olivo han participado también los dos nuevos miembros que se han incorporado a la comisión este curso. Por una parte, Carlos Bargos, secretario general de la Diócesis de Bilbao y anterior director de Cáritas Bizkaia, y, por otra, María Manrique, miembro del equipo de la delegación de Anuncio y Catequesis, y anterior presidenta de Euskalerriko Eskautak Bizkaia. Relevan en el equipo a Teo Santos, Juli Moreno y María Fernández Hierro.
Este olivo, , se une a la placa que se colocó el pasado mes de junio en los jardines de la Casa de la Misericordia de Bilbao, a los pies de una encina, también en memoria de los menores que sufrieron abusos sexuales por parte del que fuera director del centro, José Luis Pérdigo, y "algún otro religioso" en las décadas de los años 60 y 70.