Uno de los mapas más conocidos de Francisco Jorge Torres Villegas es el Mapa Político de España en el que se presenta la división territorial con la clasificación política de todas las provincias de la Monarquía, según el régimen especial dominante en ellas. El mapa distingue varias Españas: España Uniforme Puramente constitucional, comprende estas treinta y cuatro Provincias de las coronas de Castilla y León iguales en todos los ramos económicos, judiciales militares y económicos, España Incorporada o Asimilada, comprende las once Provincias de la corona de Aragón todavía diferentes en el modo de contribuir y en algunos puntos del derecho privado, España Foral comprende estas cuatro provincias exentas o forales que conservan su régimen diferente del de las demás y España Colonial comprende las Posesiones de África, las de América y las de Oceanía regidas todas por leyes especiales bajo la autoridad omnímoda de los Gefes militares.

Este mapa se incluyó en su célebre obra Cartografía Hispano-Científica o sea los Mapas Españoles, en que se representa a España bajo todas sus diferentes fases. Se publicó en dos tomos en 1852 y se hizo una segunda edición en 1857. Debajo del título aparece una pequeña reseña del autor: “Su autor, El Licenciado D. Francisco Jorge Torres Villegas, Socio de la Económica Matritense de Amigos del País”.

En esta publicación, cuyos dos tomos superan las 800 páginas, se incluyen 25 mapas de diversas y variopintas temáticas, desde los antiguos y la invasión de los árabes y los bárbaros hasta mapamundis etnográficos donde incluye la lengua vascona Familia Ibérica o Vasconica. Los escualdunak más conocidos por el nombre de vascones o vascongados, tanto en España como en Francia, de Palestina y la Tierra Santa. También incluye mapas como el eclesiástico, judicial, de la historia de la medicina o de balnearios de España. A los mapas, debidamente coloreados a mano, le acompañan los correspondientes textos explicativos, expuestos por el autor.

Uno de los estudios más completos y extensos sobre esta obra la realiza Rafael Company i Mateo bajo el título de Un mapa célebre, un mapa inexistente en un artículo en catalán en la revista de Catalunya Nº 286 en 2014. Precisamente, en dicho artículo de Company hace una relación de los autores que han merecido la atención de dicho mapa entre los que se encuentran Joseba Agirreazkuenaga, que la incluyó en el primer volumen de su obra sobre la articulación político institucional de Vasconia en 1995. En los cursos de verano de UPV-EHU de 1997, Ernest Lluch lo conoció en la ponencia que presentó J. Agirreazkuenaga e, inmediatamente, publicó un artículo en La Vanguardia. También se reprodujo en el libro Foralismo, Derechos Históricos y Democracia (1998).

A partir de ese instante el mapa conoció una nueva vida y se difundió profusamente. Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón se hizo eco de él en el ensayo Derechos Históricos y Constitución, en 1998. Hasta Jordi Pujol le dedicó algunas líneas de reflexión política a esta realización cartográfica, en 2007, en un boletín de estudios que lleva su nombre, refiriéndose a la expresión “todavía diferentes” con la que Torres Villegas caracterizaba a los territorios de la Corona de Aragón en su obra. En esta refriega sobre el mapa de Torres Villegas, en un artículo en El País en 1998 titulado Cartografía e ingeniería jurídica, Javier Ugarte arremete contra Herrero de Miñón, incluso llega a dudar del propio autor: “Todo muy bien, salvo el pequeño detalle de que nadie sabe –incluido el propio Herrero de Miñón– quién es Torres Villegas (¿un cartógrafo, un político tradicionalista, liberal?; ¿se trata de un mapa de situación o de un proyecto político?...”.

En cualquier caso, y por terminar con el artículo de Rafael Company Un mapa célebre, un mapa inexistente, el autor, a pesar de estudiar y dar a conocer el mapa político de la obra de Villegas en Cataluña, le reprocha el no haber incluido en su obra temática el mapa etnolingüístico de España que reflejase las lenguas de la península a pesar de ser citadas en el texto. De ahí la denuncia y el título de su artículo.

El autor

Otro estudio sobre la obra de Torres Villegas lo realiza el catedrático experto en cartografía Agustín Hernando en la Revista de Geografía en 1999 en un artículo titulado Los Atlas Temáticos del Siglo XIX. Saber científico y representación cartográfica. Lo clasifica como el primer atlas temático representado en España, aunque lo considera una obra modesta desde el punto de vista cartográfico. Aun así, resalta su éxito editorial por haber logrado editarse por segunda vez en 1857.

Si realizamos una búsqueda con el nombre de Francisco Torres de Villegas en internet nos aparece una gran cantidad de librerías anticuarias ofertando su obra. También de las principales bibliotecas públicas donde podemos conocer su obra cartográfica on line.

A pesar del interés de su obra y de los importantes y variados estudios sobre su obra principal, sorprendentemente, no vamos a encontrar ni una pequeña reseña sobre la biografía del autor. Más sorprendente resulta la dificultad para consultar algún estudio e incluso encontrar algún ejemplar de otras dos obras de las que fue autor: Guía de Alcaldes y Ayuntamientos, editado en 1847 en dos tomos y donde hace una minuciosa relación de todos los aspectos jurídicos y organizativos referidos a los ayuntamientos, y otra obra titulada Repertorio de Párrocos, editada en 1850 en siete tomos, donde hace una extensa exposición sobre temas de índole religioso. Además en 1844 editó un raro y excelente mural con abundantísima información titulado Cuadro sinóptico del derecho civil y criminal de España.

En el Archivo Histórico Nacional he encontrado y estudiado un documento con su expediente personal, en el que aparece con el cargo de fiscal, que nos proporciona algunos datos interesantes sobre su biografía.

Nace el 16 de abril de 1816 en Gador (Almería) y después de realizar sus estudios de bachiller se dedicó de lleno al estudio del Derecho. En 1839 un tribunal especial le acreditó los conocimientos necesarios y suficientes para el ejercicio de la abogacía. Al de poco, el gobierno provisional liberal le nombró promotor fiscal interino de Toledo. De ideología liberal, en todos los nombramientos muestra su adhesión a la reina Isabel II. En 1843 un hermano suyo, José Torres, muere en la guerra civil al servicio de Espartero por lo que Francisco Torres solicita el regreso cerca de su familia pidiendo la asignación de alguna plaza de la Audiencia de Granada. Al de unos años recaló en Madrid donde ejerció de fiscal y se convirtió en un gran erudito que escribió y editó sobre las diferentes disciplinas antes mencionadas. También se integró en la Sociedad Económica Matritense de Amigos del País.

Este mapa de un autor español de ideología liberal y que hizo su carrera intelectual en Madrid en un clima belicoso por la sucesión muestra bien a las claras y sin tapujos la diversidad de los regímenes de la península y, de una manera muy gráfica, el trasfondo de problemas endémicos y que recurrentemente aparecen a lo largo de la historia.

En definitiva, que estamos ante un autor muy conocido por una de sus obras, pero con una biografía sospechosamente invisibilizada. Esperemos que esta pequeña aportación contribuya a arrojar algo de luz sobre el autor y su obra.

Otros mapas

Continuando con la cartografía predominante durante el siglo XIX la inclusión de los cuatro territorios vascos peninsulares era lo natural y lo habitual, tanto en la preponderante cartografía francesa como en la propia cartografía militar española.

En el mapa del geógrafo francés Auguste-Henri Dufour realizado en París en 1836 además de incluir y citar los cuatro territorios peninsulares, Navarra y Provincias Vascongadas con las nuevas divisiones, incluye, sin citarlos, la toponimia de los territorios de Iparralde en un claro guiño a la existencia de una cultura común. En este mapa y siguiendo la tradición francesa de incluir textos sobre diversos aspectos históricos, económicos y administrativos del territorio representado, hace una referencia al resumen histórico de las Provincias Vascongadas del siguiente tono: “... en 1200 consintieron someterse a Alfonso VIII rey de Castilla reservándose los privilegios de que gozaban. Estos privilegios han hecho de estas provincias un estado en cierto modo separado del resto de España”.

El diario liberal Guardia Nacional, editado en Barcelona, regaló a los suscriptores en 1837 un trabajo titulado Mapa Itinerario del Teatro de la Guerra en las provincias Bascongadas y Navarra.

El cartógrafo militar español más importante del siglo XIX fue el coronel de Ingenieros Francisco de Coello, quien realizó con métodos académicos un mapa de cada uno de los territorios de la península además de colaborar con el Diccionario de Pascual Madoz. En 1874, estando ya retirado, realizó un mapa de las Provincias Vascongadas y Navarra, siendo el grabador A. Olartekoetxea.

De este mapa anterior surgió otro en 1877 bajo el título de Mapa de las Provincias Vascongadas y Navarra Dibujado y Litografiado en el Depósito de la Guerra, que lo firma el coronel jefe de la sección topográfica, Pedro de Cuenca, quien participó en operaciones en Gipuzkoa durante la tercera guerra carlista.

Con la puesta en conocimiento de estos mapas del siglo XIX realizados precisamente por autores nada sospechosos y sin ninguna tentación separadora y vinculados a una visión desde la oficialidad del poder he tratado de exponer precisamente el reconocimiento de la existencia de una realidad histórica con unos lazos de hermandad y culturales incontestables.

Precisamente cuando se ha tratado de desdibujar estas realidades históricas es cuando han surgido las reacciones y los conflictos.