Primero, en Artzentales, Galdames, Sopuerta y Muskiz con ocho aerogeneradores. Menos de un año después, se publicaba en el Boletín Oficial del País Vasco el anuncio de otro proyecto por la misma empresa (Euskal Haizie) con seis molinos en terreno de Galdames, Gordexola y Zalla. Y, aunque la promotora ha renunciado a ejecutar este segundo por la falta de capacidad de la subestación eléctrica de La Jara, la preocupación por la posible instalación de parques eólicos en la comarca a corto y largo plazo se mantiene. Prueba de ello es la presentación por parte de la plataforma ciudadana Enkarterrin Parke Eolikorik Ez de más de 700 alegaciones al Plan Territorial de Energías Renovables del Gobierno vasco.

De seguir adelante y aprobarse en los términos en los que se plantea, “acarrearía un impacto muy importante en nuestro territorio, fundamentalmente debido a la gran cantidad de cordales considerados zonas de localización seleccionada para la instalación de centrales eólicas”. En ese caso, “estas ubicaciones de suelo público serán explotadas por empresas privadas, que además de instalar los mega-aerogeneradores, construirán todas las instalaciones auxiliares necesarias para ponerlos en marcha (carreteras, subestaciones, líneas de eléctricas, etc.), con la consecuente degradación ambiental, económica y social del entorno” de estos lugares, expresaban.

Por ello, desde la plataforma exigen “la desestimación del Plan Territorial de Energías Renovables y la paralización de los proyectos de centrales eólicas y solares actualmente en tramitación, a la vez que realizamos un llamamiento a la organización de todos los grupos y personas en defensa del territorio”. Por ese mismo motivo, el jueves se sumaron a una concentración ante el Gobierno vasco en Gasteiz.

Durante el acto “se registraron en torno a 4.000 alegaciones populares recogidas en localidades de las tres provincias, que solicitan la anulación de esta ley por varias razones: porque sacrifica los recursos naturales de la comunidad, amenazando el ámbito rural y la soberanía alimentaria, porque resulta incompatible con muchas normativas de protección de espacios naturales y especies silvestres, porque no respeta las ordenaciones territoriales ni las atribuciones municipales y porque no recoge otras estrategias fundamentales para la transición energética (reducción del consumo, autoconsumo, descentralizacion, etc. ), entre otros factores”, enumeran.

También ayuntamientos

Diferentes ayuntamientos de la comarca están optando por la misma vía para expresar su oposición a la construcción de parques eólicos en Enkarterri. Lo anunciaron Zalla, Balmaseda y Sopuerta y ahora Alonsotegi –que ya se movilizó en el pasado contra un proyecto similar en el Ganekogorta que no llegó a materializarse– acaba de compartir con la ciudadanía el documento completo rubricado también por el alcalde de Arrankudiaga y la alcaldesa de Arrigorriaga.

“Estas alegaciones no pretenden negar el uso de energías renovables, conscientes de la necesaria transición energética. Por tanto, apuestan claramente por el uso de las mismas, pero no a cualquier precio y mucho menos en cualquier sitio, y justificando su ubicación de forma arbitraria y sin criterios técnicos”, argumentan. Añaden que el documento responde a una redacción tan apresurada que está sacrificando todos los controles ambientales, procedimentales y de participación pública” exigibles en la tramitación del plan.