El importante proyecto impulsado por el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia (CABB) para incorporar las aguas residuales procedentes de los municipios arratiarras de Bedia, Lemoa, Igorre, Arantzazu, Dima, Artea, Areatza y Zeanuri a la EDAR de Galindo, ubicada en Sestao, sufre un retraso en su finalización. Tal y como confirman a DEIA fuentes de la entidad, las obras iniciadas a principios de 2022 “tenían un plazo inicial de 18 meses y la fecha de finalización prevista inicialmente era el día 10 de abril de 2023”. Sin embargo, el Comité Directivo del CABB, “con fecha enero de 2023, acordó aprobar una ampliación del plazo de ejecución de obra de 8 meses, debido a problemas con los suministros de materiales, especialmente paramenta eléctrica y componentes de automatización”. Aunque la obra civil “está prácticamente terminada”, aún quedan pendientes “todos los trabajos relacionados con la instalación eléctrica y de telecontrol”, por lo que el nuevo plazo para su conclusión ha quedado fijado para “el 10 de diciembre de 2023”, precisan.
El objetivo final de esta actuación es dejar fuera de servicio la EDAR de Bedia que, a consecuencia de su antigüedad, en episodios de fuertes precipitaciones de lluvia sufre desbordamientos de agua sin tratar denominados alivios que acaban llegando al río. Situada en el barrio Asteitza del municipio de Bedia, la EDAR entró en servicio en 1997 dentro del proyecto del saneamiento del río Arratia y tiene capacidad para depurar las aguas fecales de 11.500 habitantes. Con un caudal máximo de tratamiento de 284 m3 a la hora, en 2018 depuró casi un millón y medio de metros cúbicos de aguas fecales e industriales, aguas que una vez limpias y controlada su calidad son devueltas al río Ibaizabal. La planta cuenta con sistemas de desbaste de sólidos, gruesos y finos, desarenado, decantación primaria, tratamiento biológico y una decantación secundaria con la que se finaliza la depuración.
Sin embargo, en épocas de intensas de lluvias se producen numerosos episodios de alivio en la EDAR de Bedia hasta el punto de que, según los datos, en 2014 ocurrió en 141 ocasiones, en 2013 hasta 180 veces y en 2012 hubo un total de 98 fugas de este tipo. De ahí que el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia tomara la determinación de anular esta infraestructura y conectar el sistema de saneamiento de la comarca de Arratia con la depuradora de Galindo. Actualmente, este sistema está construido y en servicio hasta el núcleo de Usansolo en Galdakao, es decir, hasta el punto en el que está ubicado el Interceptor Plazakoetxe-Usansolo.
La inversión asciende a 3.250.021,44 euros (IVA excluido) y ha consistido en la construcción de un nuevo colector de conexión entre la depuradora de Bedia y Galindo, la renovación de parte de las instalaciones existentes y la creación de una nueva estación de bombeo en la margen derecha del río Ibaizabal y aguas arriba del puente que da acceso a Usansolo, por el extremo opuesto al hospital.
Una de las afecciones de la obra ha sido el cierre del camino de la margen derecha del río Ibaizabal, en el tramo comprendido entre la rotonda de la N-240 de acceso al barrio de Usansolo y la central hidroeléctrica de Bedia. Desde el Consorcio informan que su apertura aún no es posible porque “los trabajos de alumbrado del vial no se pueden llevar a cabo hasta junio, ya que están condicionados al suministro de las luminarias led, un modelo solicitado por el Ayuntamiento de Bedia”. El camino se reabrirá ”cuando cuente con iluminación y el Ayuntamiento dé su consentimiento”.
Saneamiento Arratia
Objetivo. Dejar fuera de servicio la EDAR de Bedia que, a consecuencia de su antigüedad, en episodios de fuertes precipitaciones de lluvia sufre desbordamientos de agua sin tratar denominados alivios que acaban llegando al río.
Proyecto. La inversión supera los 3,2 millones de euros y recoge la construcción de un nuevo colector de conexión entre la depuradora de Bedia y Galindo, la renovación de parte de las instalaciones existentes y la creación de una nueva estación de bombeo en la margen derecha del río Ibaizabal.
Retraso de 8 meses. Los trabajos tenían que haber concluido el 10 de abril. Sin embargo, y debido al retraso en la llegada de algunos tipos de suministros y materiales, el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia ha ampliado el plazo hasta el 10 de diciembre.