Con motivo del Día Internacional de la Educación que se celebró el pasado 24 de enero, el profesorado ha aprovechado dicha efeméride para reclamar herramientas para luchar contra el acoso escolar o para atender a niños con dificultades de aprendizaje, como aquellos con trastorno del espectro del autismo (TEA) o trastornos por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).

Se trata, en palabras de la directora del Máster Universitario en Acoso Escolar y Mediación de la Universidad Internacional de Valencia (VIU), Antonia Martí, de herramientas que resultan necesarias, ya que “cada vez se ven más desbordados por este tipo de situaciones con formas más variadas: bullying, ciberbullying, grooming, sexting, homofobia o conductas disruptivas”.

Al mismo tiempo, añade, los docentes “tienen que asumir el reto” de fomentar la prevención y ser capaces de “generar actuaciones efectivas para prevenir estos actos tanto en entornos escolares como fuera de ellos”. 

Según la experta, la forma “más efectiva” de conseguir estos objetivos es mediante la formación en materia de acoso escolar de los agentes educativos que estén en contacto con niños y adolescentes.

 Considera que el Coordinador de Bienestar Infantil en los centros educativos, cuya figura se ha implantado este curso, “debe de estar centrado en la prevención e intervención ante cualquier situación, que vaya en contra de la normal convivencia del centro, tanto para con los alumnos como con las familias”.

Precisamente, ha insistido en que la idea es que esta figura “fomente las medidas de prevención necesarias para que las situaciones de acoso no se lleguen a dar”. 

Además, la nueva figura, como otras que están surgiendo relacionadas, deberían, según ha reclamado Martí, ser desempeñadas por un profesor “con una formación previa en materia de igualdad, convivencia, mediación y resolución de conflictos”. 

“Ya que formarse en estas materias da a los profesores habilidades para poder enfrentarse a los problemas que sufren sus alumnos y para poder trabajar con ellos y buscar soluciones desde distintos ámbitos”, ha concretado.

RETO PARA DOCENTES

En referencia a cómo educar a los niños con dificultades de aprendizaje, entre los que se encuentran desde distintos trastornos del lenguaje hasta el TDAH, el TEA, la dislexia o la discaculia, la directora del Máster Universitario en Dificultades del Aprendizaje y Trastornos de la Comunicación en Contextos Socioeducativos de la VIU, Laura Sánchez, ha advertido de que esto supone “un reto” para los docentes que necesitan herramientas para la detección de estos fenómenos en sus alumnos y para ser capaces de atender “de manera efectiva” a estos niños en las aulas.

“Esta es una de las grandes tareas de la educación inclusiva y es necesario para mejorar el aprendizaje de estos niños y el pronóstico de sus posibles trastornos del neurodesarrollo”, ha manifestado.

Por ello, Sánchez ha hecho hincapié en que es “fundamental” que los profesionales de la educación cuenten con los conocimientos y los recursos adecuados para realizar estas intervenciones, lo que convierte, a su juicio, “en indispensable una formación específica”. 

“Sin todo ello, la educación de estos niños en las aulas resulta imposible”, ha asegurado la experta.

DIGITALIZACIÓN DE LOS MÉTODOS DE ENSEÑANZA

Otro de los retos a los que se enfrenta el profesorado es cómo utilizar las tecnologías para que los alumnos aprendan más, ya que, desde la llegada de la pandemia, el uso de las TIC en la educación se ha acelerado, ofreciendo nuevas posibilidades de innovación para transformar las actuales metodologías docentes, hacia otras más activas.

En esta ocasión, ha sido el director del Máster en Tecnologías de la Información y la Comunicación Aplicadas a la Educación de la VIU, Francisco José Recio, quien hace hincapié en la necesidad de apostar por “mejorar la calidad y la cantidad de la enseñanza relacionada con las tecnologías digitales, favorecer la digitalización de los métodos de enseñanza y las pedagogías, y proporcionar las infraestructuras necesarias para un aprendizaje a distancia inclusivo y resiliente”. l