Los vecinos del barrio de Ugarte en Trapagaran soportan a diario el paso de unos 5.000 vehículos, de los cuales un 5% son camiones, que utilizan la N-634 (BI-3724 en los tramos cedidos a los municipios afectados) para el transporte de personas y mercancías. Una situación viaria que dificulta enormemente la conectividad peatonal de los habitantes de este pequeño núcleo de apenas 700 habitantes con el centro urbano del municipio donde se ubican los principales servicios ciudadanos. Una cuestión de no fácil solución técnica, debido sobre todo por la configuración urbana del barrio entorno a esta vía rodada que apenas cuenta con arcenes por los que caminar con seguridad. Para combatir esta problemática y mejorar el tránsito ciudadano con el centro urbano, la Diputación Foral de Bizkaia financiará una nueva fase de mejoras entre los barrios de Ugarte y Zaballa mediante la construcción de un nuevo itinerario peatonal. La obra, que conlleva una inversión de 811.000 euros por parte de la institución foral, forma parte de un convenio de colaboración entre la Diputación y el Ayuntamiento de Trapagaran en el que se incluye la cesión de la titularidad de este tramo de la carretera foral BI-3724. “La ejecución de la actuación en la N-634 se considera necesaria y conveniente para mejorar la seguridad y la accesibilidad peatonal entre los barrios de Ugarte y Zaballa, sustituyendo el arcén existente en dirección a Cantabria por un itinerario peatonal que discurra por el borde de la carretera y que dé continuidad a las aceras existentes ejecutadas en tramos anteriores”, anunció el Diputado Foral del Departamento de Infraestructuras y Desarrollo Territorial de la Diputación Foral de Bizkaia, Imanol Pradales. Por su parte, Javier Pérez de Palomar, edil de Urbanismo de Trapagaran, remarcó que el objetivo de este proyecto “es dotar de servicios urbanísticos necesarios entre estos barrios de Trapagaran, así como la construcción de la acera y la ejecución de nuevas canalizaciones para redes de suministro eléctrico o telecomunicaciones”.

1430 metros

En concreto, en la carretera BI-3724, que tiene una longitud de 1.430 metros y está calificada como urbana en todo su recorrido excepto el tramo que se pretende urbanizar, se prevé la construcción de aceras y la creación de nuevas señales viales tanto horizontales como verticales así como la colocación de defensas para la seguridad de los peatones como biondas, vallas metálicas y algunos bolardos. El convenio contempla acciones como la construcción de tres tramos de muros de altura variable, la ejecución de una nueva acera de tres metros de anchura, bordillo de granito y baldosa abujardada. Además, la obra incluirá la construcción de una nueva red de aguas pluviales y una nueva red de alumbrado. Esto supondrá la ejecución de nuevas canalizaciones soterradas para redes de suministro eléctrico y telecomunicaciones además de la disposición de mobiliario urbano.

Xabier Cuéllar, alcalde del Trapagaran, corroboró que la construcción de la acera entre Ugarte y Zaballa “permitirá mejorar la accesibilidad entre ambos barrios e incrementar la seguridad de los vecinos y vecinas del municipio. Este es sin duda un buen ejemplo de la importancia que tiene la colaboración interinstitucional para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía”.