Este pasado verano, la patinadora Olaia Tejeda, vecina de Berango, se proclamó campeona del mundo de baile deportivo en Alemania. A sus 18 años, lejos de quedarse ahí, ahora ha vuelto a saborear las mieles del éxito en Italia en el campeonato internacional Italian Championship (válido para la liga Mundial de la WorldCDF) celebrado este pasado mes de noviembre.

Una nueva gesta que no se esperaba a pesar de que desde el mundial tenía marcada en rojo la fecha de noviembre en Milán. En la capital mundial del diseño y la moda, Olaia realizó una gran exhibición que le permitió obtener el primer puesto en la modalidad de baile moderno y el segundo puesto en clásico.

Todavía emocionada, relata que ha sido muy especial poder disfrutar de esta experiencia con su “familia, equipo y compañeros de selección”, que tanto le apoyan. “Sin ellos no sería igual”, resume agradecida.

“Mi idea era ir al campeonato de Italia a aprender. Era mi debut en la categoría Novice”

Olaia Tejeda - Patinadora

En un primer momento, por su cabeza rondaba acudir al campeonato italiano como experiencia de “aprendizaje” puesto que “nunca había participado en un campeonato internacional de esta talla”, desvela. Y es que debutó en una nueva categoría, Novice, a la que ascendió tras el mundial, y que es “mucho más exigente”, con bailes nuevos. “Debutaba en una categoría nueva para mí, con nueve bailes nuevos, pero siempre tengo esas ganas de seguir experimentando y viviendo estas experiencias que me llenan”, describe. Cuando sale a la pista, la explosión de su talento eclipsa cualquier atisbo de inexperiencia propia de la juventud.

En concreto, durante su actuación, bailó moderno (tres bailes) y clásico (seis), y pese a los nervios iniciales “de esos sanos que te hacen sentirte alerta”, matiza, luego todo fue sobre ruedas. “Una vez en pista, sobre todo cuando empiezas a bailar, te sale solo todo el entrenamiento, lo sientes y bailas como sabes”, apunta. Como bien dice, “a más nivel, más dificultad”, pero nada le detiene. “Había mucho nivel y atletas de todo el mundo dispuestas a ganar con sus bailes. Ha sido una pasada poder compartir pista con semejantes bailarinas”, subraya.

Olaia con su entrenador Joan Morro Vallori. O. T.

De esta manera, una vez conquistada Italia, echa la vista atrás y relata que ha vivido “una experiencia enriquecedora, para vivir y revivir una y otra vez”. Un sueño hecho realidad del que no quiere despertar. Pero eso no le hace olvidarse de los que están más cerca. Por eso agradece la ayuda prestada “a su familia y compañeros”, al Ayuntamiento de Getxo por cederle las instalaciones para entrenar, al Ayuntamiento de Berango por su apoyo incondicional, a su club Show Getxo “por ser mucho más que un club” y a Joan Morro Vallori que como entrenador le ha sabido guiar “de la mejor forma”, indica.

Trayectoria

Olaia empezó a patinar a los 3 años por tradición familiar y con el paso del tiempo ha ido perfeccionando su técnica hasta convertirse en lo que es hoy en día. Su familia materna siempre ha patinado, tanto sus tías como su madre, por lo que no es extraño que se empezara a poner los patines casi siendo un bebé. “Empecé jugando sobre las cuatro ruedas”, relata. Más adelante se convirtió en la primera patinadora de Euskadi en patinar en campeonatos internacionales con la selección española. Más allá de la vertiente deportiva, tiene claro que es necesario compaginar el deporte con los estudios. Por eso este año ha empezado a cursar la carrera de Fisioterapia. “Una carrera exigente, pero a la vez apasionante”, resume. Un binomio, estudios y deporte, inseparables a su juicio. “El deporte es vida y los estudios son futuro”, sostiene. Pero además de hincar los codos y entrenar, también invierte muchas horas fuera de la pista en “coaching, maillots, peinados, etc.”. Una exigente rutina que le está dando resultados y no le da tregua. Por eso ya tiene el billete reservado para Mallorca, sede de su próximo desafío: el campeonato de España.