El Super gold de los World Cheese Awards aupó al queso de TGT Lácteos de Karrantza “entre los 84 mejores de los 5.000 aspirantes al concurso”, explica la directora de la planta, María José Benito. La Medalla de Oro Gourmet Quesos reafirmaba que “el primer reconocimiento no fue una casualidad”. Un queso “innovador, madurado, mezcla de leche de vaca certificada Eusko Label en un 70% y oveja latxa al 30%”, describe Mario Sánchez, director de investigación y desarrollo del grupo TGT, que desembarcó en Enkarterri en 2019.

Con el primer premio del Salón Gourmet, categoría mezcla.

Contentos, “pero no sorprendidos”, celebran que haya gustado un queso “con tan poca andadura todavía en el mercado, que, sin embargo, exhibe un potencial enorme en los concursos porque hemos conseguido elaborar un producto con carácter y artesanal, de montaña en un proceso totalmente natural”. Su particularidad reside en que, pese a elaborarse “con leche pasteurizada, y tres meses de maduración, al saborearlo recuerda a los de leche cruda”. “Muy cremoso y muy versátil, no posee excesiva maduración, es muy limpio en boca, equilibrado, con matices ácidos no muy intensos con notas húmedas que remiten un poco a tierra, a champiñón” y se comercializa en formatos “tanto de cinco kilos como cuñas de un kilo y 200 gramos”.

Además de queso, la planta produce leche UHT y nata.

La “colaboración con productores del entorno ha resultado crucial para obtener un producto como este queso Unaiak, para el cual “hemos trabajado con leche label de la zona y de oveja latxa amparada bajo la Denominación de Origen Idiazabal; se trata de un queso englobado en una gama Eusko Label de Hazi y Gobierno vasco para potenciar otro tipo de propuestas”, profundiza María José Benito.

Empleo en la comarca

De las “alrededor de setenta personas” que conforman la plantilla, “prácticamente todas residen en Enkarterri: gente joven de Karrantza y alrededores”, lo que supone “un impulso a un paraje tan bonito y especial que cuenta con el contrapunto de la relativa lejanía de Bilbao y el viaje por carreteras sinuosas”.

La planta se sitúa este año en una facturación “de en torno a los veinte millones de euros y en plena campaña elaboramos treinta toneladas de queso”. Aparte del galardonado Unaiak, producen queso “también de oveja cruda y una línea de fabricación de leche UHT y envasa natas para montar o cocinar, la última en formato spray, así como cremas vegetales con una aplicación más industrial y bolsas para productos lácteos desde diez hasta mil litros”. Se les da salida hacia “comercios, industria u hostelería”.

De la fusión de “la armadura industrial con un corazón muy artesanal, el dar valor al kilómetro cero y focalizarnos en las denominaciones de origen” se obtiene “el espíritu del origen, que es uno de los secretos de lo que está pasando en Lácteos de Karrantza”, valora Mario Sánchez. El grupo catalán TGT llegó al valle a través del Gobierno vasco. Con anterioridad “otras compañías” habían desarrollado su actividad en la fábrica sin terminar de cuajar. Desde Lakua “contactaron con nosotros con una propuesta porque estaban interesados en favorecer el crecimiento de Karrantza”. “Cuando te plantas allí, ves esa vegetación y esas montañas... piensas que deben salir cosas buenas sí o sí”, y confían en seguir cosechando premios.