La expansión del coronavirus en la red de residencias de mayores que controla la Diputación de Bizkaia está contenida, según los datos facilitados ayer por el ente foral por primera vez desde que la pandemia azota el territorio histórico.

Con los datos recogidos al finalizar el pasado domingo, en la red de 155 residencias autorizadas para personas mayores en el territorio histórico tan solo se registraban 45 casos positivos por el covid-19, repartidos tanto entre personas usuarias como entre los profesionales que les cuidan, la gran mayoría mujeres. Una cifra baja teniendo en cuenta que la oferta foral suma 10.748 plazas, según el Servicio de Inspección y Control del departamento de Acción Social.

Desglosados los casos positivos, ocho de ellos son usuarios que siguen atendidos en la propia residencia donde habitan, 25 mayores están hospitalizados y doce son cuidadoras. En estas 45 personas está confirmada su infección con el virus. Además, existe un colectivo de 52 trabajadoras que se encuentran en aislamiento en sus respectivos domicilios al no estar confirmado que padezcan la enfermedad.

Este colectivo de enfermos solo ocupan veinte de los 155 centros residenciales, de los cuales uno culminó el periodo de catorce días de aislamiento, sin haber registrado nuevos casos.

Por otra parte, desde hoy los sanitarios que trabajan en el hospital de Basurto podrán estacionar sus vehículos en parte de la explanada cercana al estadio de San Mamés. Varios operarios delimitaban ayer el espacio que estará activo desde hoy y que será vigilado por la Policía Municipal para que los usuarios acrediten su condición de trabajador del centro y no se cuelen incívicos.

La medida fue tomada por el Consistorio tras los problemas de aparcamiento que tiene el Basurto desde que fue declarado el estado de alarma y su repercusión en forma de retenciones que se dan a primera hora de la mañana en el acceso viario cercano al centro hospitalario.

El pasado día 16 las medidas restrictivas de movilidad generaron un gran problema a partir de la 7.00 horas, con retenciones que llegaron hasta la autopista, con motivo de las colas que formaban los profesionales del hospital de Basurto en su intento por aparcar sus vehículos privados en alguno de los dos estacionamientos del centro sanitario, que estaban llenos.

De forma excepcional, la Policía Municipal decidió habilitar parte de la explanada de San Mamés para que pudieran aparcar esa mañana. El uso de coche privado se ha multiplicado entre el personal, que prefiere no usar el transporte público ya que son un factor de riesgo de contagio.

Los problemas de aparcamiento continuaron hasta ayer, con esperas de hasta 45 minutos a primera hora de la mañana, y eso que el Ayuntamiento permitió que los coches de los sanitarios tengan permiso en el sistema de OTA bilbaino en virtud de su trabajo.

Los bomberos forales procedieron ayer a desinfectar estos espacios de mayores empezando por la residencia IFAS de Leioa y la de mayores en Balmaseda, a los que seguirán otras dependencias en las próximas jornadas.

10.748

Es el número de plazas que suma la red de 155 residencias autorizadas por la Diputación Foral. De todas ellas solo 33 usuarios han dado positivo en coronavirus y ocho de ellos permanecen en sus habitaciones.