Barrika - Pero, como los integrantes del club se extendían por todo Uribe Kosta, decidieron apostar por un nombre que englobase a todo el movimiento que ellos denominan “Uribe Kosta Goikoko Surfing Kultura”. Para ello se fijaron en un nombre popular, de los pescadores de la zona, que llaman al pulpo amarratz. Así surgió su nuevo registro: Amarratz Surf Taldea. Ahora, tras 29 años de andadura, el club acaba de renovar su dirección en lo que supone un relevo generacional.

La asamblea extraordinaria celebrada recientemente -el club cuenta con 160 socios-, nombró a Niko Elektriko Vázquez como presidente, a Benjamin Benja Bueno como vicepresidente y a Iker Txitxer Santocildes como secretario. Niko se adentró en el mundo del surf con 10 años, por tradición familiar, y a sus 24 forma parte de esa tribu de “nuevos locales” que han tomado las riendas del club con el objetivo de insuflarle aire fresco.

Sobre esta línea, si bien el club ha atravesado momentos difíciles, el nuevo equipo directivo entra con “mucha motivación e ideas para generar consenso, protección del entorno natural y mucha vida en torno a nuestra particular Uribe Kosta Goikoko Surfing Kultura”, explica su nuevo máximo dirigente, Niko Vázquez.

El club de Barrika, Gorliz, Lemoiz y Plentzia apuesta por “un proyecto horizontal e integrador que dinamice de nuevo nuestro ánimo de trabajar juntos en la preservación de nuestro pequeño gran universo surfístico”, apunta. “Vamos a tratar de hacer sentir parte de este proyecto a los surfistas de nuestro entorno”, destaca.

Hoja de ruta

Así, con una idiosincrasia muy particular que va “más allá del surf”, entre sus principales objetivos en esta nueva etapa que se abre para el club de Uribe Kosta está uno primordial por encima de todo. “Conservar nuestro entorno natural”, subraya Niko. Habituales de la playa de Barrika, han observado que en los últimos tiempos cada vez acude más gente a este arenal salvaje. Una mayor afluencia que conlleva, en su opinión, mayor contaminación. “La repercusión del turismo en el entorno conlleva mayor cantidad de residuos, desechos, etc., que nosotros tratamos de recoger para preservar el medio ambiente y de concienciar a los usuarios de la playa para que recojan sus basuras”, apunta el dirigente. Para ello, anualmente organizan una serie de recogidas como la que ha organizado recientemente en la zona la asociación Goazen UP. “Les estamos muy agradecidos por el trabajo que han realizado”, sostiene Niko. Y es que, en el ADN del club están otros fines como “preservar el medio ambiente y fomentar la cultura surfera”. “Queremos desempeñar un mayor activismo ecológico, surfístico y cultural. Para ello estrecharemos las relaciones con los ayuntamientos y las asociaciones locales”, desvela. Entre sus próximos retos está el de tratar de “incentivar el arreglo de las escaleras de acceso a la playa de Barrika, que están deterioradas” y el de impulsar “un campeonato de surf en invierno en Plentzia”.