Amigos de la cooperante Nerea Pérez-Arróspide impulsan el Centro Cultural Aminata en Senegal

MUSKIZ. La sala Azkena de Bilbao acogerá este próximo jueves a partir de las 21.00 horas un festival solidario en favor del proyecto Aminata, denominado así en honor a la joven cooperante y arquitecta vizcaina, Nerea Pérez-Arróspide Navallas, quien falleció el pasado año en Senegal donde se encontraba haciendo lo que más le gustaba: ayudar a los demás. “Nerea falleció en un accidente de tráfico cuando se desplazaba hacia el pueblo de Gandiol, donde colaboraba en la construcción de un centro multiusos destinado a promover el desarrollo comunitario de sus habitantes, que contaran con espacios de encuentro para que los jóvenes y la comunidad puedan llevar a cabo sus propias ideas e iniciativas”, señalan Lidia Sánchez y Roberto Miguel, dos muskiztarras que eran amigos de Nerea y que se han convertido en los garantes de su memoria y del futuro de este proyecto solidario que puso negro sobre blanco Nerea, o Aminata, como la rebautizaron en lengua Wolof los vecinos de Gandiol.

“Es un compromiso que tenemos todos los que fuimos amigos de Nerea para culminar este proyecto de Centro Cultural Aminata que nació en abril de este año”, apuntan los muskiztarras quienes confían en que el concierto solidario del día 29 sea un éxito y se puedan obtener fondos para acabar la edificación y llevar a cabo la puesta en marcha del centro. “Hasta ahora hemos hecho bastantes actividades solidarias. Incluso en fiestas de Bilbao, la comparsa Pinpilinpauxa nos cedió un turno solidario”, recuerdan desde Muskiz los amigos de Nerea.

El cartel del festival solidario, cuyo precio de entrada es de 5 euros, cuenta con la participación de los grupos getxotarras Marban -un grupo de sonidos rockeros al más puro estilo inglés- y del músico de rumba/reggae Santi Guzmán, que acaba de editar su primer EP. El festival permitirá además dar a conocer los pormenores del proyecto Aminata para lo cual se contará con la participación y los testimonios de Borja Picó y Sapalí, llegados desde Senegal.

Aminata

Nerea, Aminata, llegó a Senegal en 2013 con una amiga y allí conoció el proyecto que intentaba llevar a cabo el activista y escritor senegalés Mamadou Día, fundador de la ONG Ha Ha Tay, que inició su andadura en 2012 y encontró en la figura de la cooperante vasca la preparación técnica suficiente para elaborar el proyecto arquitectónico del centro. Lamentablemente, Nerea fallecería en septiembre de 2015 sin ver concluido este proyecto solidario que, a través de la ONG Ha Ha Tay y los amigos de la joven, está encontrando apoyos en todo el Estado español.

“Mamadou estuvo viviendo en Euskadi durante casi 8 años hasta que en 2012 decidió retornar a su país con la idea de poner en marcha proyectos de interés comunitario”, resalta Roberto, quien señala la creación de sendas cooperativas de mujeres -una en torno a un pequeño gallinero y otra con un secadero de pescado- como parte de los proyectos con los que empezó la ONG senegalesa a la que se han ido añadiendo con los años numerosos cooperantes.

“Allí funcionan varios campamentos que cuentan con el apoyo de muchos cooperantes españoles aunque últimamente se han ido incorporando voluntarios italianos, griegos, franceses o brasileños”, destaca Roberto Miguel. Estos voluntarios iniciaron entre otras labores la construcción de un aula de preescolar de apoyo para un colegio cercano “con botellas de plástico rellenas de arena”. Ahora toca culminar el Centro Cultural Aminata, el de Nerea.