Bilbao
FALDA larga, camisa de manga hasta la muñeca y pañuelo en la cabeza. En cuanto a su atuendo, Marijaia es de ideas fijas. Su color, el rosa. Y en las manos, unos inmaculados guantes. Aun así, descubrir el nuevo modelo que ha escogido la reina de las fiestas el día del txupinazo continúa despertando la misma curiosidad que en aquellos primeros festejos llegada la democracia. Este año, en cambio, DEIA ha logrado descubrir lo que este icono bilbaino esconde tras su falda. Y todo gracias a los diseñadores vizcainos, que han puesto a trabajar su creatividad para vestir de calle a Marijaia. Luciendo las piernas, con tacones, la melena rubia al viento e, incluso, de novia. Esta Aste Nagusia Marijaia se ha lucido más camaleónica que nunca.
Nueve osaron aceptar el reto de DEIA. Nueve diseñadores locales que han echado el resto para imaginar cómo vestirían a Marijaia si estuviera dentro de uno de sus probadores. Alicia Rueda, Edurne Ibáñez, Mercedes de Miguel; Juana Ruiz y Garbiñe Urdampilleta, de Jota+Ge; Maite Grande, de la firma Nut; Olatz Uriarrizaga, creadora de Ian Mosh; Peio Durán, Javier Barroeta, y Ana Santos y Olatz Eskiroz, de la firma Traka Barraka, descubrieron cada día una faceta nueva de la reina.
Confesaban que les costó dar un nuevo aire -su propio aire- a Marijaia. Pero para todos los diseñadores fue una experiencia divertida, especial y única. Algunos, como las jóvenes creadoras de Traka Barraka, ya habían fantaseado con dar color a la protagonista de Aste Nagusia, pero a la mayoría ni se les había pasado por la cabeza. "Se trata de un icono tan tradicional, que cuesta mucho actualizarla", explicaba Durán. Por eso, cada uno de los rediseños se ha basado en un mismo factor: el respeto.
Inspirándose en la historia, la más reciente y la más lejana, creó Alicia Rueda su diseño; un look clásico de la dama bilbaina, incluido el pañuelo, pero que rompía lo habitual con un largo lazo rosa, "muy característico en mis diseños y muy de Marijaia también", aseguraba la diseñadora.
La historia, pero la del pueblo vasco, fue el punto de partida también para Ibáñez, que plasmó un top con falda corta que tenía como protagonista el pañuelo a cuadros. Y también lo hizo Grande, que se acordó de la mar y las sardineras santurtziarras que llegaban hasta la villa con una colorida falda y un chaleco de malla que recordaba a las redes de pesca. La ciudad y su pasado industrial, con los colores del acero y sus edificios más emblemáticos sirvieron de inspiración a Durán, que culminaba su diseño de levita azul Bilbao y falda plateada con unas flores de diferentes colores, "porque no podemos olvidar que estamos en fiestas".
Con las piernas al aire Las de hace una semana han sido las primeras fiestas en las que Marijaia dejó al descubierto sus largas piernas. De la mano de De Miguel, la reina saldría al balcón del Teatro Arriaga con una minifalda llena de color y optimismo. "A que son bonitas las piernas de Marijaia. Este era uno de los mejores secretos de nuestra chica: sus piernas estupendas", asegura la diseñadora, que creó unas medias hasta la rodilla en homenaje al Athletic.
También se animaron a mostrar las piernas de la reina las creadoras de Jota+Ge. Bajo esta firma, Marijaia luciría un vestido con los colores de Bilbao, azul y rojo. Unos tacones y "el complemento perfecto, que es un collar largo", explicaban las diseñadoras. Luciendo pierna, pero con pololos, estaría la reina de Aste Nagusia bajo las puntadas de Traka Barraka. "¡Adoramos a Marijaia! Hemos cogido sus atuendos y los hemos transformado un poquito (ríen)", aseguraban dotando de color y lunares el atuendo del icono festivo, a quien dibujaron realizando esquí acuático por la ría de Bilbao.
Los diseños han sido variopintos pero solo uno se ha atrevido a vestir de blanco a Marijaia. El diseñador Javier Barroeta ha visto en Aste Nagusia una fecha perfecta para celebrar una boda. "Marijaia no podía escoger otra fecha mejor para casarse", aseguraba este modisto de alta costura. Sus agujas diseñaron un vestido largo cuyos protagonistas son unos bolsillos cosidos a la cadera que representan la baldosa de Bilbao. De ramo, unas rosas rojas, "para que así pueda llevar los colores de la bandera de Bilbao", explicaba Barroeta. Pero como Aste Nagusia da para mucho, en los últimos nueve días festivos, Marijaia también se pudo acercar a disfrutar de la naturaleza. De ahí, el aire campestre que dio a la reina bilbaina la firma Ian Mosh. La inspiración de Iruarrizaga pasa por "las manzanas y las cerezas que crecen en los árboles durante el verano".
Así se han imaginado a la dama de Aste Nagusia los mejores diseñadores vizcainos, los ya consolidados y también los que están empezando. Pero, aunque Marijaia se vista de seda, Marijaia se queda .