Bilbao. Iñigo Palomino, el que fuera último director general de Euskotren en el último Ejecutivo Ibarretxe, volverá a ocupar el cargo de máximo responsable de la compañía ferroviaria dependiente del Gobierno vasco. Según ha podido saber DEIA, el nombramiento será efectivo mañana, en la reunión del primer consejo de administración de la sociedad de Ferrocarriles Vascos que se celebra tras el cese de los vocales nombrados por el anterior Gobierno López. En el Consejo de Gobierno del pasado martes se firmó el cese de los miembros del consejo de administración de Euskotren y el nombramiento de los nuevos con el viceconsejero de Transportes, Antonio Aiz, en primer lugar, ya que tendrá las labores de presidente de la entidad. Según ha podido saber este periódico, Iñigo Palomino será nombrado en ese cónclave director general de Euskotren y en su persona confluirá toda la responsabilidad ejecutiva de la compañía.

Tal y como anunció el lehendakari, el adelgazamiento de las estructuras de Lakua y sus sociedades iba a ser un hecho y la compañía ferroviaria es un ejemplo, ya que se ha decidido eliminar el cargo de consejero delegado, por encima del cargo del director general, un puesto que hasta ahora ejercía el exalcalde socialista de Santurtzi, Javier Cruz. Cuando Palomino ejerció como director general tenía por encima al entonces consejero delegado, Julián Eraso.

APAGAR FUEGOS La llegada del nuevo Ejecutivo a la sociedad pública se produce en un momento difícil para la compañía. La gestión de Javier Cruz y José Ignacio Asensio, anterior director general, ha estado sembrada de polémicas. Así, la relación con la parte social se ha deteriorado con paros y huelgas, además de enfrentamientos entre los sindicatos y denuncias ante los juzgados. El nuevo equipo de Euskotren tendrá que calmar las aguas internas que bajan revueltas en su plantilla y analizar algunas de las iniciativas que en la última época de Javier Cruz fueron cuestionadas. Ejemplo de ello son la anulación de varios contratos de servicios en vigor para volver a sacarlos a concurso y ser readjudicados a las mismas empresas que ya venían trabajando para Euskotren o la aventura uruguaya, que pretendía modernizar el servicio de mercancías de los ferrocarriles de ese país suramericano.

Iñigo Palomino Zubiaurre, vecino de Elgoibar y de 39 años, es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Comercial de Deusto y desde que abandonó su responsabilidad anterior en Euskotren (de septiembre de 2007 a junio de 2009) ha estado trabajando como auditor en el Tribunal Vasco de Cuentas Públicas. Casi tres años y medio en los que ha incrementado sus conocimientos con la realización de máster en Gestión de Empresas Executive MBA en la Universidad del País Vasco. Este economista tiene amplia experiencia en el mundo del transporte ya que también fue director de Transportes en el Gobierno vasco entre julio de 2005 y septiembre de 2007, después de que ocupara varias responsabilidades en las áreas financieras y de Recursos Humanos de varias empresas privadas.