Etxebarria. Antes de que finalice el año darán comienzo las obras que permitirán dotar de mayor visibilidad a los conductores que accedan desde el barrio de Iturreta a la carretera BI-2636 que une Markina y Etxebarria. Los trabajos consistirán en la eliminación de varios elementos que entorpecen la visión de la salida del cruce en dirección a Markina circunstancia que, pese a que existen señales de limitación de velocidad, en ocasiones ha provocado accidentes y excesivos sustos al encontrarse los vehículos que superan la curva anterior con los que se incorporan al vial.
De esta manera, se eliminará el murete paralelo a la calzada y se demolerá un edificio que se usaba como carbonera, para lo cual la Diputación ha necesitado expropiar el terreno a su dueño. De la misma manera, se desbrozará la vegetación existente en la zona, aunque no será necesario derribar el centenario alcornoque que se erige en el lugar.
Tras llevar a cabo los correspondientes trámites legales, está previsto que la actuación comience a finales de año y que se prolongue por un plazo aproximado de un mes. "Es una demanda de los vecinos de Iturreta y de los empleados de la cooperativa Arrasate que en más de una ocasión se han llevado algún susto en este cruce", explicó el primer edil etxebarritarra Jesús Iriondo.
El alcalde recordó que esta obra será posible gracias al acuerdo alcanzado con el departamento de Obras Públicas de la Diputación Foral de Bizkaia, que aportará los 139.000 euros de coste del proyecto, y que fue ratificado en el pleno del pasado jueves. "Los ediles de Bildu votaron en contra argumentando que antes querían examinar el proyecto, pero eso es algo que el departamento foral realiza con posterioridad a cerrar el convenio". Según el edil jeltzale: "De no haberse aprobado al acuerdo, se hubiera perdido la subvención".