Portugalete. Portugalete y, más concretamente, el centro comercial Ballonti acogió ayer toda una exhibición de gimnasia rítmica. Y es que las alumnas del club Zubiarte ofrecieron un espectáculo que, simplemente, entusiasmó al público. Porque lo que estas jóvenes demostraron es que la gimnasia rítmica en Portugalete pasa por un momento dulce.

Al acto de ayer en Ballonti acudieron 40 jóvenes de entre 4 y 20 años; todas ellas, alumnas del club de gimnasia rítmica Zubialde, cantera de este deporte en la villa desde 1953. Fue, precisamente, en esta fecha en la que se inauguró la entonces escuela de esta disciplina de la mano de la getxotarra Begoña Manchón.

"A esta mujer le gustaba mucho este deporte por lo que hizo varios cursos y al final abrió la escuela por donde hemos pasado cientos de personas de Portugalete y también de Santurtzi", recuerda Itziar Álvarez, presidenta del club y una de las seis profesoras que enseñan esta disciplina deportiva y artística que aúna plasticidad y flexibilidad.

En aquellos primeros años, rememora Itziar, había una gran cantidad de alumnas "y se consiguieron varias participaciones exitosas en campeonatos estatales", mientras que hoy día las mejores perspectivas a nivel federado están depositadas en el conjunto alevín -entre 11 y 12 años- "que puede dar mucho juego porque es un grupo muy bueno", remarca Álvarez.

Como todos los deportes, la gimnasia rítmica tiene sus ídolos y para las jóvenes que ayer se movían nerviosas por Ballonti ese ídolo es la alavesa Almudena Cid.

En la actualidad, el club Zubialde cuenta con participantes de todas las categorías desde benjaminas hasta senior "aunque sólo hay chicas", reconoce Itziar, quien anima a los chicos a practicar porque "es un deporte que aporta una gran musculación y una gran flexibilidad". A su juicio este deporte, además de musculación "permite en los hombres una gran potencia en los saltos, lo que les dota de una gran belleza plástica", se potencian otra serie de condiciones como la coordinación y el sentido del ritmo, el oído, "ya que la gimnasia acompaña a la música", explica Itziar.

Ayer sobre el tapiz desplegado en el centro comercial Ballonti, las émulas de Almudena hicieron vibrar a varios cientos de personas que no dudaron en aparcar sus compras para regocijarse con los delicados movimientos de estas atletas que presentaban en su pueblo un avance de lo que será el trabajo de este curso en el polideportivo.

"Ahora mismo, con tantas niñas tenemos problemas de espacio, ya que tenemos muy poco tiempo y parte de él lo tenemos que emplear en poner y quitar el tapiz sobre el que practican", indica Itziar.

Junto a ella, las alumnas juveniles se aprestan a ofrecer un nuevo número con aros. Figuras como el pino puente, palomitas y como no el espagat arrancan los aplausos del público. La gimnasia rítmica de la villa tiene una gran cantera.