Bilbao impone una multa de 600 euros al Obispado por el abandono de la parcela de Abando

El Ayuntamiento ha impuesto una multa coercitiva de 600 euros al Obispado de Bilbao por desobedecer el requerimiento municipal que le instaba a restituir la urbanización de la parcela de Abando en el plazo de tres meses. Además, contaba con 15 días, desde el 10 de noviembre para reparar la barandilla caída entre la calle Heros y la calle Barraincua hasta la restitución de la urbanización a su estado original, así como aportar certificado final y liquidación de la parte de obra que ha sido ejecutada.

El obispado, que anunció la construcción de la sede del Obispado de Bilbao –Bizkeliza Etxea– y de una clínica de Mutualia, tampoco ha atendido esta demanda. De esa manera, el Consistorio insta a que "inicie la restitución de la urbanización ordenada y repare la citada barandilla" en el plazo de cinco días. Y, en caso de incumplimiento, advierten que se les impondrá una nueva multa de 600 euros que se repetirá mensualmente hasta alcanzar los 6.000 euros "de persistir en la desobediencia".

Las obras del edificio se iniciaron en octubre de 2023 pero quedaron paralizadas en abril de 2024, tras la quiebra de la empresa constructora Murias, que entró en concurso de acreedores dos meses antes. El proyecto fue objeto de críticas y movilizaciones vecinales desde un inicio, ya que que se oponían a la construcción y reclamaban un espacio verde y “habitable” en los terrenos.

El Ayuntamiento de Bilbao dio por caducada, en septiembre de este año, la licencia de obra solicitada por el Obispado de Bilbao el 29 de diciembre de 2021 “por no haberse ejecutado –ni prácticamente iniciado– las obras en el plazo autorizado”, que es de 36 meses. El Consistorio añade que, como consecuencia de la caducidad, “ya no se podrá llevar a cabo la construcción del edificio objeto de autorización”. Además, denegó la solicitud de prorroga por parte del Obispado de Bilbao, aunque apuntaron nada impedía que tramitaran una nueva licencia de obra.

ABANDO HABITABLE

Mientras tanto, se les emplazaba a recuperar el solar –donde la presencia de ratas es evidente– y solventar los desperfectos visibles en las aceras que rodean la manzana. "Dos semanas después de que venciera el plazo el Obispado no ha cumplido con la resolución municipal", han censurado este lunes desde la plataforma vecinal Abando Habitable, que ha recordado el "evidente deterioro de la zona".

En ese sentido, han evidenciado que cuatro años después de que se aprobara la licencia de obra, el Ayuntamiento no ha cobrado los correspondientes impuestos. Y, además, han criticado que la multa impuesta resulta "simbólica" teniendo en cuenta "los más de 22 millones de euros que se ha embolsado el Obispado con este pelotazo". Por ello, consideran que la administración municipal debería "intervenir subsidiariamente para evitar riesgos para la seguridad y la salud en la vía pública".