El estado de conservación del inmueble Molinos Vascos lleva años arrastrando la calificación de “extremadamente deficiente”. También ostenta la catalogación de Monumento, y como tal debe ser conservado. Sin embargo, un informe de la Diputación Foral de Bizkaia que confirma la existencia de amianto en las planchas de fibrocemento vuelve a cruzarse en el proceso de recuperación del histórico edificio localizado en Zorrotza.

Nada más y nada menos que 19 toneladas de este material tóxico sobre el que el Ayuntamiento de Bilbao tendrá la oportunidad de posicionarse sobre este asunto durante el próximo pleno a petición de Elkarrekin Podemos. Desde la formación morada consideran “absolutamente necesario” que la Administración municipal asuma las riendas en este asunto de forma previa, antes incluso de que la institución foral tome cartas en el asunto.

A juicio de Ana Viñals, portavoz de la coalición, se trata de “una cuestión de salud pública y de prevención”. Por eso, y más allá de la propiedad del edificio y de la legislación que obliga a todos los ayuntamientos a elaborar un censo de instalaciones y emplazamientos con amianto, “nos parece absolutamente necesario que el Gobierno Municipal – de manera subsidiaria –actúe con urgencia”, ha sentenciado.

Colapso del tejado

La ciudadanía del núcleo de Zorrotza lleva años preocupada por el estado de deterioro del edificio. “Son muchas las ocasiones que han manifestado que dicho inmueble acumula materiales tóxicos e incluso han denunciado el colapso del tejado que lleva años desprendiéndose, dejando caer y dispersando por el entorno partes de su cubierta hecha de amianto”, ha zanjado Viñals, quien pedirá el aislamiento o encapsulamiento de la cubierta del edificio de los Grandes Molinos Vascos para aislar el material tóxico.