Las calles adyacentes a la futura llegada soterrada del TAV a Bilbao no se contemplan aún como zonas de oportunidad inmobiliaria. Los continuos retrasos encadenados por el proyecto –según las últimas previsiones, el túnel no estará finalizado antes de 2033– han templado los ánimos de compra en los barrios aledaños. “Llevamos tantos años esperándolo que yo ya no me atrevo a decir a la gente que va a ser a corto o a medio plazo”, reconoce Mercedes Esteban, asesora inmobiliaria de Quorum. “Una cosa es que ahora puede haber expectativas y otra, que una vez que se consume, vaya a tener más demanda”, asevera, por su parte, José Manuel González Robles, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria.

Infografía de la ultima versión del proyecto de la estación soterrada de Abando que albergará los andenes para el TAV, trenes de cercanías y de media distancia Adif

Por el momento, desde las inmobiliarias apuntan que no han percibido un incremento del precio de las viviendas situadas en calles cercanas como Bailén, Zabala, García Salazar o San Francisco. Gonzalo Irizar, gerente de la Inmobiliaria Irizar, va más allá: “No creo que pueda haber una revalorización a corto plazo. No hay clientes que nos hayan dicho que van a subir el precio porque se vende mejor ahora”. En ese sentido, expone que cuando tienen que liquidar una vivienda en la zona tratan de otorgarle un valor añadido, porque “tiene que tender a mejorar al ser una infraestructura que va a costar muchos millones de euros”. Sin embargo, apunta que la respuesta del comprador puede ser la siguiente: “Si lleva quince años parado, ¿por qué se va a hacer ahora? El argumento no se sustenta”.

Mercedes Esteban también sostiene que los precios se mantienen. “Es más, en Hurtado Amezaga me cuesta vender pisos porque está muy próximo a la zona de Zabalburu, incluso aunque estés a tres minutos de la plaza Eguillor y de El Corte Inglés. Y las zonas de la estación, a veces, no a todo el mundo le gustan”, expone la asesora de Quorum, quien, no obstante, considera que la situación cambiará. “A futuro, cuando todo esté terminado, incluso con los bloques de viviendas anunciados en la cubierta, la zona se revalorizará”, indica Esteban, quien menciona otras zonas de Bilbao en las que así ha ocurrido.

“Ya lo vimos cuando desapareció el scalextric de Bilbao, la entrada por Sabino Arana. Siempre es algo positivo para las viviendas de alrededor y para todas las construcciones que han venido después”, afirma la agente inmobiliaria, quien cita la zona de Garellano, que no era una de las más atractivas la ciudad y, ahora, es muy demandada por muchos de sus clientes. En esa línea, menciona también Miribilla o Zorrotzaurre como zonas que en su día fueron una oportunidad: “Ese espacio de Abando es el que falta por mejorar. Es una apuesta en la que se pueden encontrar viviendas más baratas y que, en un futuro, se revaloricen”.

Pero todavía habrá que esperar para ello. Juan Manuel González Robles compara esta posibilidad con lo que supuso la paulatina implantación de las estaciones de metro de Bilbao a lo largo de las dos márgenes de la ría y detalla que, a medida que se iban haciendo operativas, se reflejaba en la demanda. “Alegra el mercado sin llevar a cabo una subida”, considera el presidente del colegio, quien apunta que suele haber gente dispuesta a comprar por las expectativas, sin embargo, cuando se tratan de vender pisos sobrevalorados, no se despachan hasta que se ajustan los precios.

Aplazamientos

Más de tres décadas sin fecha

Para 2033. Fue en 1989 cuando Sevilla comenzó a dar forma efectiva a la llegada de la línea de alta velocidad a la capital andaluza. Por aquel entonces, los primeros borradores para que el TAV arribara a Euskadi hacían pensar que sería el siguiente objetivo. Sin embargo, la primera piedra tardó en colocarse 17 años y, desde entonces, el proyecto no ha hecho más que encadenar retrasos. Lo último que se sabe es que el túnel por el que el TAV llegará a Bilbao desde Basauri estará finalizado en su totalidad en 2033. Así lo anunció hace tres semanas el consejero Iñaki Arriola, quien sin embargo no quiso lanzar ninguna previsión sobre cuándo estará terminada la estación soterrada de Abando.