Bilbao puede decir con orgullo que tiene un metro de récord. Con casi 21 millones de desplazamientos entre junio y agosto –en concreto 20.883.649–, supone un aumento de uso del transporte público suburbano de un 16% respecto a 2022 –se hicieron 17.925.087 viajes–. No se queda aquí, el metro ha batido con un 2,5% de diferencia el que hasta la fecha era el mejor registro veraniego, recogido en 2019 –con 20.381.545 desplazamientos–.
Según se ha confirmado durante la celebración del Consejo de Administración de la empresa la tendencia alcista se ha consolidado en el mes de septiembre. Tras el fin de las vacaciones y el regreso de la actividad laboral y escolar el metro ha logrado igualar su mejor demanda histórica en días laborales y los fines de semana la supera en un 15%.
Una vez conocidos los datos divididos en días y franjas horarias, se releva que los mejores registros han tenido lugar durante las jornadas festivas y las tardes de entre semana, haciendo del suburbano la mejor alternativa al transporte público para cuestiones relacionadas con el tiempo de ocio. Sin olvidar el récord batido durante Aste Nagusia, en el que se dieron 2.3 millones de validaciones. En el presente ejercicio, el balance actual marca casi 9 millones más de viajes que el mismo periodo del año pasado.
Incidencias
53.200 viajes es el impacto estimado que provocaron los dos percances sufridos recientemente en el metro los días 25 de agosto y 7 de septiembre. La primera de estas obligó a suspender el servicio durante casi cuatro horas por la rotura de un cable de catenaria en Areeta. El segundo lo provocó una nueva rotura, esta vez del hilo de contacto de catenaria entre el Casco Viejo y Abando.
