El Ayuntamiento de Bilbao recurrirá al Supremo la sentencia de cultos

BILBAO - El Ayuntamiento de Bilbao va a recurrir al Tribunal Supremo el fallo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que ha aceptado el recurso de la comunidad evangélica y por tanto anula la prohibición de abrir centros de culto en los bajos de edificios residenciales. El concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Eduardo Maiz, así lo anunció ayer. Por su parte, tanto la comunidad evangélica como el portavoz de la Federación de Vecinos de Bilbao, coincidieron en que “la solución no puede venir de los tribunales” y apelaron a la necesidad de abrir “ una mesa de participación” para encontrar una solución dialogada a este conflicto.

La sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco se hizo pública el martes y supone, al menos, un toque de atención al Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Bilbao, al aceptar el recurso que presentó la Iglesia Evangélica contra la ordenanza de cultos que aprobó el pleno municipal el 25 de septiembre de 2013. El fallo, sin embargo, no entra en el fondo del conflicto que se ha suscitado en Bilbao con respecto a la apertura de centros de cultos, sino que se ciñe a aspectos puramente urbanísticos.

El TSJPV estima que no se garantizó la participación ciudadana en la modificación del Plan General de Ordenación de Bilbao y es precisamente lo primero que se va a subsanar desde el Área de Urbanismo, según informó ayer Eduardo Maiz. “Vamos a retomar la modificación del PGOU en este aspecto. Además, previo a la celebración de la junta de gobierno, abriremos el plazo de alegaciones y solicitaremos la tramitación”. Pero, además, el concejal de Urbanismo adelantó que “sí vamos a recurrir al Supremo porque entendemos que se ha utilizado una normativa de la ley de suelo que no corresponde y también vamos a recurrir a la comisión de ordenación del territorio”. Sin embargo, Maiz descarta abrir una mesa de participación que debata sobre este asunto puesto que “el urbanismo tiene que ser aplicable a todos por igual”.

El debate y la participación ciudadana es tanto para la comunidad evangélica como para la federación de vecinos, la vía que debe explorar el Ayuntamiento. A pesar de que este conflicto surge tras las quejas de algunos vecinos a la apertura de centros de culto, el propio presidente de la Federación de Vecinos dijo ayer que “no se pueden poner fronteras, tendremos que convivir con identidades distintas”.

Por su parte, los servicios jurídicos que han defendido el recurso de los evangélicos estiman que este fallo, “tiene que hacernos pensar en la necesidad de abrir un espacio de participación ciudadana para que se regule de la mejor manera posible este asunto garantizando la tranquilidad ciudadana”.