La villa fija dos fases para abonar los 20 millones pendientes con Ría 2000

BILBAO. El Ayuntamiento de Bilbao va a liquidar con Bilbao Ría 2000 los 20 millones de euros pendientes fruto del traslado de la sede de Iberdrola de la calle Gardoqui a la nueva torre en Abandoibarra. Para ello, tiene de plazo hasta el 18 de enero de 2015; sin embargo, dada la situación saneada del Consistorio, los responsables municipales han decidido adelantar los deberes y liquidar las cuentas pendientes en dos fases antes de diciembre de 2014.

El traslado de la sede de Iberdrola a Abandoibarra en 2005 liberó para la construcción de viviendas el edificio que hasta entonces ocupaba la empresa eléctrica. De esta forma, el rendimiento obtenido de la construcción ayudaría a la compañía a construir su nueva sede corporativa en un edificio emblemático. El Área de Urbanismo puso como condición que el nuevo inmueble de viviendas proyectado para la calle Gardoqui tuviera un patio interior que permitiera que los nuevos pisos fueran luminosos y de mayor calidad. Pero, esta cláusula restaba, a su vez, a Iberdrola un aprovechamiento urbanístico de 9.000 metros cuadrados aproximados, cuyo valor rondaría los 20.745.000 euros, puesto que rebajaba el número de viviendas posibles en el edificio.

acuerdo En aquel momento, el Ayuntamiento, en vez de pagar la diferencia económica, se la transfirió a Ría 2000, encargada del proyecto de la torre. De esta manera, Iberdrola descontó del montante total los más de 20 millones que se le de adeudaban. Y, para ello, el Ayuntamiento y Bilbao Ría 2000 firmaron un acuerdo que convenía la forma más adecuada de concretar ese aprovechamiento y comercializarlo de acuerdo con el interés de ambas partes. Se estipulaba que bien se podría materializar en zonas de nuevo desarrollo urbano, mediante permuta de terrenos, o bien, si pasados diez años desde la firma del convenio no se hubiese llegado a un acuerdo, el Ayuntamiento tendría que recomprar a Bilbao Ría 2000 la totalidad de ese aprovechamiento por la cantidad fijada de 20.745.000 euros, más el IPC acumulado en el periodo.

Este convenio expira el 18 de enero de 2015 con una situación urbanística bien distinta a la de aquella época. El desarrollo de la crisis en el mercado inmobiliario actual dificulta cualquier acuerdo para la materialización de ese aprovechamiento, con lo que la recompra se presenta como la única alternativa posible, según Andoni Aldekoa, director del gabinete de Alcaldía.

Ocurre que, según aquel convenio, los 20,7 millones de euros actualizados con el IPC desde enero de 2005 a abril 2013 ascienden ahora a 25,7 euros. Sin embargo, la situación actual del mercado hace que esos aprovechamientos en estos momentos hayan perdido valor. Así, según fuentes municipales, el precio actual se situaría en 13.119.841, lo que supondría una pérdida de valor de 12.583.214 euros.

La decisión del gobierno municipal ha sido adelantarse al 18 de enero de 2015 y actuar para ir afrontando poco a poco esa situación pendiente.

Dos fases La liquidación se ha estipulado en diferentes fases. Una parte en terrenos y otra en dinero. Así, en junio, el Ayuntamiento de Bilbao ha propiciado que se compren a Bilbao Ría 2000 5,5 millones de aprovechamientos en una operación de permuta con el edificio del RAG. Descontado este dinero, el Ayuntamiento debe afrontar en estos momentos el pago de 20,1 millones de euros. Para ello, ha puesto plazos concretos a la liquidación pendiente con la sociedad pública. Este verano indemnizará a la sociedad con 12.583.214 euros, es decir, la cantidad estimada en la devaluación de los terrenos. Y, antes de diciembre de 2014, facilitará a Ría 2000 la venta de los aprovechamientos a un tercero -que deberá ser privado- o bien los comprará él mismo, ya que tiene capacidad económica fruto de los remanentes de tesorería de los ejercicios de 2011 y 2012; en total, 19,4 millones de euros. La modificación de norma de la Diputación de Bizkaia, que permite la utilización de remanentes, da cobertura jurídica a esta operación.

El gobierno municipal entiende que "ahora tenemos que seguir manteniendo el tirón de la ciudad", añade Aldekoa. Según aclara, Bilbao apuesta "por seguir con el rigor económico, mantener la calidad de vida de la ciudad que permita que la villa siga siendo atractiva, atender la crisis (acción social y empleo) y seguir invirtiendo en los barrios para que la ciudad siga teniendo actividades y sea un referente internacional".