Lo que era un tesoro a buen recaudo desde hace más de un mes ha obtenido el certificado matemático este domingo en Miribilla. El Surne Bilbao Basket ya ha cumplido con su principal objetivo de cada temporada y acabará el ejercicio siendo, como poco, uno de los 16 mejores equipos de la competición. La guinda a la permanencia un curso más en la Liga Endesa a falta de tres jornadas para su cierre de telón ha llegado con la victoria ante el Leyma Coruña (79-67), que se dejó en El Bilbao Arena el fino hilo de vida que le quedaba y ya es equipo de Primera FEB.
Los de Jaume Ponsarnau, con la baja de última hora de Tryggvi Hlinason además de la de Malcolm Cazalon, dominaron el encuentro prácticamente de principio a fin y solo se complicaron la vida en un tercer cuarto en el que los de Diego Epifanio aprovecharon el 1 de 9 en triples y cierto desorden de los anfitriones para acercarse hasta un inquietante 44-39 después de haber llegado a perder por 17 puntos antes del descanso.
Sin embargo, con sus constantes vitales galopando de la mano de su efectividad desde la larga distancia (15 de 44 global), los anfitriones recuperaron el acierto desde la línea de 6,75 y pese a las ganas de Brandon Taylor de resistir haciendo la guerra por su cuenta aniquilaron a los gallegos con un 17-5 de parcial en el arranque del cuarto final. En esos momentos marcaron diferencias los tres triples de Rubén Domínguez, los dos de Melwin Pantzar y el excelente trabajo en ambos aros de un Bassala Bagayoko que, al igual que Harald Frey, dio un importante paso al frente también en esos compases del tercer cuarto en los que parecía que el asunto podía complicarse más de lo deseado.
PENDIENTES DEL TRIPLE
Ambos equipos arrancaron la contienda sumamente desacertados, con los anfitriones dejándose por el camino hasta cuatro triples absolutamente liberados en los cuatro primeros minutos y también con escasísimo toque cerca del aro. Con empate a seis puntos en el ecuador del primer acto, el conjunto vizcaino necesitaba más tino y orden para imponerse en pista y Tomasz Gielo, Pantzar, Frey y Amar Sylla dieron un paso al frente. Los misiles lejanos empezaron a entrar y los diez primeros minutos se cerraron con un magnífico 20-9 tras un parcial de 14-1.
Hasta el 27-10 llegó la ventaja de los ‘hombres de negro’ antes de que Aleix Font cortara la sangría en forma de parcial de 21-2 con dos triples seguidos. El Leyma Coruña intentó reactivarse desde la larga distancia, pero el Surne Bilbao Basket le respondió una y otra vez con la misma moneda. El 37-21 a cuatro minutos del descanso seguía siendo un marcador excelente, pero entre Beqa Burjanadze y Olle Lundqvist intentaron mantener la verticalidad de los de Epifanio para que al ecuador de la contienda se llegara con un 42-31 que dejaba trabajo por hacer. Con su 9 de 23 en triples (por el 3 de 15 de su rival), los de Ponsarnau contrarrestaban su inferioridad en el rebote y el buen hacer de los gallegos en la ‘pintura’.
INQUIETUD
En la reanudación, el conjunto vizcaino compareció en cancha sin filo ni acierto, cometiendo además cinco personales en menos de tres minutos y medio de juego, y el Coruña no solo bajó sin problemas de la brecha sicológica de los dobles dígitos, incluso se vio en disposición de quemar sus últimas opciones de permanencia. Con el 44-39 tras un ‘dos más uno’ de Karlis Silins, las cosas ya no se veían tan claras, pero en el momento más complicado fue el chaval, Bagayoko, el que dio un paso al frente con dos canastas y una asistencia a Thijs De Ridder. Un triple de Frey devolvió algo de tranquilidad al Surne Bilbao Basket (53-42), pero Epifanio dio galones y bola para el todo o nada a Taylor y el estadounidense, con dos triples, envió la cita a sus diez minutos finales con un inquietante 56-49.
Pero el conjunto vizcaino compareció en el acto final dispuesto a no hacer prisioneros. Arrancó con dos triples de Pantzar, otro de Domínguez y Bagayoko siendo protagonista en ambos aros, protegiendo el suyo y maltratando el del rival, y se acabó lo que se daba. Parcial de 11-0, 67-49 a siete minutos del final y sello matemático al principal objetivo. A partir de ahí, el alero gaditano siguió luciendo muñeca, el pívot maliense recibió una gran ovación de Miribilla cuando fue sustituido y el conjunto vizcaino, liberado de su principal meta, jugará las tres jornadas finales con el objetivo de seguir sumando victorias para retornar a Europa el próximo ejercicio.