A sus 53 años, Jaume Ponsarnau cuenta con ya una larga experiencia en los banquillos de élite, tanta que La Casilla, donde este miércoles dirigirá al Surne Bilbao Basket en su estreno en la FIBA Europe Cup ante el Balkan búlgaro, no le resulta un recinto desconocido a pesar de que hace ya más de tres lustros que no alberga los encuentros como locales de los ‘hombres de negro’. De hecho, su primera experiencia en el recinto bilbaino estuvo a punto de no producirse.

“La primera vez que fui a La Casilla fue como tercer entrenador hace muchos años y en la mañana del partido tuve un cólico nefrítico, pero finalmente eso no me impidió vivir una experiencia tan bonita, porque es una pista muy bonita, muy entrañable”, recordó este martes. Aquel episodio aconteció el 12 de diciembre de 2004 y Ponsarnau era el tercer entrenador de un Ricoh Manresa dirigido por Ricard Casas que cayó derrotado por 82-65 por un Bilbao Basket que vivía su temporada de estreno en la Liga ACB, con César Sanmartín (19 puntos), Richard Scott (13) y Pedja Savovic (12) como pilares.

El técnico catalán también ejerció de primer entrenador de los manresanos en La Casilla. “Perdí, pero dimos caña”, apuntó. De hecho lo hizo en dos ocasiones. En la campaña 2007-08 cayó por 89-77 ante un equipo vizcaino en el que brillaron Javi Salgado, Marcelinho Huertas, Luke Recker y Quincy Lewis y una temporada después el resultado fue más ajustado, un 97-93 con Marko Banic y Salgado como jugadores más destacados para contrarrestar los 30 puntos de Josh Asselin en el bando contrario.