Una de las frases más utilizadas en el deporte es la que dice que los jóvenes tienen que tirar la puerta para llegar a la élite. Pero también estaría bien que se la encontraran abierta, que no sea blindada o infranqueable, como ocurre últimamente en el baloncesto. La fuga de talento desde los clubes de la ACB empieza a ser preocupante y “los clubes tenemos que darle una vuelta a esto ya que si no podemos competir con dinero, porque las condiciones que ofrecen en la NCAA son inasumibles, sí con oportunidades a nivel profesional. Si los jugadores demuestran que valen, hay que darles minutos“, dice Rafa Pueyo, director deportivo del Bilbao Basket.

Las exigencias de la competición y el resultado inmediato hacen que los clubes y los entrenadores pequen de falta de valentía, de no apostar por jugadores “que son muy destacados en categorías de formación y que tienen mucho talento, pero necesitan que se les dé un impulso”. El Bilbao Basket ha realizado varias apuestas este verano de las que espera recibir un retorno deportivo y económico y ha reactivado las relaciones con el Zornotza y el Santurtzi para ofrecer mejores oportunidades a los jóvenes del entorno y establecer una escalera apetecible. En este sentido, cabe subrayar que los planes iniciales para el primer equipo incluían a cuatro jugadores del año 2003, considerados entre los mejores de Europa de esa generación: Thijs De Ridder, Rubén Domínguez, Fedor Zugic, que había firmado tres años, y Yannick Nzosa. Estos dos últimos no llegaron por distintas razones y se les sustituyó, respectivamente, por un veterano como Zoran Dragic y otro jugador de solo 22 años, pero con más experiencia, como Amar Sylla.

La figura de Jaume Ponsarnau ejerce de atracción por su fama de tener buena mano con los jóvenes y así llegaron Rubén Domínguez y Carlos Taboada, con quienes el técnico catalán ha trabajado este verano en la selección española U22. El primero fue MVP del Europeo U16 de 2019 y segundo máximo anotador del Mundial U19 de 2021, o sea que las herramientas ya las tiene. Pueyo espera que Domínguez pueda “demostrar sus muchas cualidades al más alto nivel”. El alero gaditano desborda clase y es un ejemplo paradigmático de estos jóvenes a los que hay que dar vuelo más pronto que tarde, por pura necesidad, y sin que ellos tenga que mermar el nivel competitivo de la Liga Endesa y sus equipos.

En cuanto a Taboada, también ha sido internacional en categorías formativas, con un papel más discreto, pero sus 2,15 metros y 21 años merecen prestarle atención y dedicación. “Va a estar a tiempo completo con el Zornotza, pero también va a tener sesiones individuales y grupales con nosotros cuando haya la posibilidad como un profesional más”, explica el director deportivo, que cree que tener relaciones con el Zornotza “nos permite incorporar jugadores jóvenes como Taboada para estar en dinámica de ACB y jugar en Segunda FEB y que el Zornotza, a su vez, acceda a jugadores que puedan verlo atractivo por estar el Bilbao Basket detrás”.

Con todo, el fichaje más llamativo del verano ha sido el de Bassala Bagayoko, que tiene solo 17 años y ha llegado con un contrato de cuatro temporadas. Es una apuesta a largo plazo que el club está convencido que le va a resultar productiva, lo mismo que consideran los agentes del jugador más joven en debutar en la ACB. Lo primero es que el chico se recupere completamente de la grave lesión de rodilla que cortó esa prematura irrupción en la Liga Endesa, pero tampoco sería descartable que acabe esta temporada jugando en el Zornotza para adquirir ritmo competitivo. “Bassala tiene que recuperarse y en función de su estado decidiremos los siguientes pasos”, apunta Pueyo, no obstante.

El Bilbao Basket también mira a su cantera y a Bizkaia. Del equipo de Tercera FEB están en la pretemporada Iker Chacón, Kepa de Castro, Eneko Salinero y Urko Madariaga. Chacón será el jugador que estará más en la dinámica del primer equipo, “un poco con el papel que el año pasado tenía Barandalla. A los demás puede que les necesitemos, pero podrán ser estos u otros en función de su trabajo”. Madariaga y Oier de las Heras se han incorporado desde el Santurtzi, con el que el Bilbao Basket ha firmado un convenio que permite que “nuestros juniors puedan competir en liga nacional los fines de semana para tener un partido de más exigencia”.