Con la bajada del telón de la temporada regular de la Liga Endesa, llega el momento de las despedidas en el seno del Surne Bilbao Basket. Una de las que se daba como segura era la de Georgios Tsalmpouris y el pívot griego ha utilizado su cuenta de Instagram este martes para despedirse del club y de su afición, poniendo fin a temporada y media como ‘hombre de negro’.
“No es la forma en la que desearía irme, pero la vida rara vez nos da las cosas como queremos… Quiero agradecer al Bilbao Basket y a todos sus aficionados por su apoyo durante las dos últimas temporadas. A pesar del amargo adiós, Bilbao siempre estará en mi corazón como una de las etapas más bonitas de mi vida. Hasta la vista”, ha apuntado, con respuestas de cariño y agradecimiento de compañeros como Adam Smith o Melwin Pantzar.
Tsalmpouris, interior de 2,16 metros de altura y 27 años, llegó al conjunto vizcaino en febrero del año pasado para sustituir al lesionado Jeff Withey. Había arrancado ese curso en el Betis y la entidad de Miribilla pensó que su capacidad para lanzar desde la línea de 6,75, su gran especialidad, podía ser de ayuda ante la ausencia del pívot estadounidense, de perfil muy diferente al suyo. Pese a no acabar de brillar del todo en lo estadístico (6,6 puntos de media en 14 partidos con un 58,7% en tiros de dos pero un flojo 25% en triples), su renovación se consideró apropiada para formar en la presente campaña la rotación interior del equipo junto a Denzel Andersson, Thijs De Ridder, Tryggvi Hlinason y Sacha Killeya-Jones.
Flojo rendimiento
Sin embargo, pronto quedó claro que la apuesta no iba a ofrecer buenos dividendos. El desacierto de cara al aro de Tsalmpouris ha descendido todavía más en la temporada que acaba de terminar, así como los minutos de juego que le ha concedido Jaume Ponsarnau, con De Ridder ocupando el espacio que en teoría iba a corresponderle.
En 22 encuentros de Liga Endesa ha promediado 3 puntos con un horrible 16,7% desde la distancia triple. Desde la jornada 21 únicamente saltó a cancha en tres ocasiones y en las últimas siete no llegó a los cuatro minutos de juego. Ahora, continuará su carrera profesional lejos de Bilbao.
