El Bilbao Basket inicia hoy su decimonovena temporada en la Liga Endesa con un duelo de esos que se califican como trampa. Lo hace en Miribilla, donde tiene que apoyar todas sus expectativas de no pasar apuros y no puede perdonar demasiado, y lo hace ante el Morabanc Andorra, un recién ascendido que podría parecer un rival asequible para sumar la primera victoria, pero al que se le intuyen recursos suficientes para aspirar a ese mismo objetivo. Los del Principado han hecho lo mismo que los hombres de negro hace cuatro cursos. Bajaron tras una temporada nefasta, pero han regresado a la primera oportunidad y han mantenido a mucha parte del bloque del ascenso, lo que en teoría les concede alguna ventaja a la hora de afrontar las primeras jornadas.
El equipo vizcaino llega con algunas dudas tras una pretemporada incompleta por culpa de episodios incontrolables que le han privado de algunas pruebas de calidad. Sin embargo, Jaume Ponsarnau confía en que el hecho de jugar en casa eleve la competitividad del grupo y disimule alguna de las carencias que aún presenta su equipo, que tienen que ver con que en todos los puestos menos en el de alero hay, al menos, un jugador nuevo.
La defensa del Bilbao Basket, que ha dado un buen tono en varios tramos de la pretemporada, será un recurso irrenunciable para tratar de contener a un rival que tiene mucho talento acumulado, sobre todo en las posiciones de perímetro, y jugadores con experiencia y carácter. También Tyson Pérez, que brilló en la segunda mitad del curso pasado con el Betis, aparece como otro jugador del Andorra a vigilar por su despliegue físico.
Será la primera oportunidad para vislumbrar las posibilidades de esta plantilla del Bilbao Basket, que se considera más larga que la del curso anterior, con más recursos físicos y una versatilidad que hoy puede ser un aspecto a explotar. Pan-tzar, Kullamae, Killeya-Jones o De Ridder, por hablar de aquellos con escaso o ningún recorrido en la Liga Endesa, tienen que empezar a mostrar algunas de las virtudes que han justificado su fichaje, aunque en el partido de hoy, probablemente, el peso deba recaer en los Renfroe, Hlinason, Reyes, Rabaseda o Smith, que conocen el percal y tienen que marcar las diferencias y liderar a su equipo a un primer triunfo que sirva de rampa de lanzamiento a otro curso tranquilo.
