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"Lo importante siempre es dar la cara y asumir por igual las críticas y los halagos"

Álex Mumbrú es una referencia del Gescrap Bizkaia dentro y fuera de la cancha. Sus grandes actuaciones recientes le han vuelto a colocar en la órbita de la selección española para este verano porque sigue siendo el mejor tres puro de la competición.

"Lo importante siempre es dar la cara y asumir por igual las críticas y los halagos"J.M.M.

bilbao. Álex Mumbrú (Barcelona, 12-6-1979) se ha convertido en el eje del juego del Gescrap Bizkaia. Su polivalencia le permite hacer muchas cosas en la cancha y su experiencia le ayuda a la hora de tomar la responsabilidad sin asustarse, como ocurrió en Sevilla cuando su triple forzó la prórroga y fue clave en uno de los triunfos más valiosos de la temporada.

Estas dos semanas sin competición europea les han servido para rebajar la tensión. Supongo que les habrá venido bien.

Ya lo creo. Hemos podido descansar después de semanas muy exigentes en la que no había tiempo para hacer otras cosas. Lo hemos agradecido, pero ahora sabemos que si no hacemos un buen papel en la Liga Endesa, todo lo que hemos hecho va a quedar solo en un buen recuerdo. Hay que centrarse y en eso estamos.

La Euroliga ha sido muy exigente, pero ¿qué regusto les ha quedado?

Por ser un equipo novato, sobre todo la hemos disfrutado y hemos competido, que al final es lo fundamental. Hemos hecho la mejor Euroliga que podíamos, nos hemos dejado la piel hasta el último segundo por llegar lo más lejos posible. Sabiendo que hay grandes equipos en la Final Four y que llegar allí era muy complicado, el equipo ha demostrado que tiene, sobre todo, carácter.

¿Ha quedado alguna cuenta pendiente?

No, siempre te gustaría haber hecho un poco más, pero no queda nada pendiente. Creo que el equipo ha luchado, ha sacado el carácter y cuando das el máximo, no se puede pedir mucho más.

¿Y ahora cómo afronta el Gescrap Bizkaia lo que queda de temporada?

Hay que ir partido a partido, como venimos haciendo últimamente, sin hacer cábalas. Respetamos a todo el mundo, pero queremos hacer nuestro juego y llegar al play-off en la mejor forma posible.

Al principio de temporada, se dijo que al equipo le pesaba jugar dos competiciones. Ahora, eso ha cambiado. ¿Cuál ha sido el motivo?

Ha sido algo mental y de acostumbrarse a esa exigencia. Al principio, como buenos novatos, casi les veíamos venir. Quizás no supimos asumir las dos competiciones y perdimos partidos porque, probablemente, no estábamos bien preparados para jugarlos. Todo el mundo sabe que la Liga Endesa es muy complicada y si te despistas, te gana cualquiera. Luego, aprendimos y ahora que solo tenemos la Liga, esperamos que nos sirva para llegar lejos.

Da la impresión de que el equipo se siente ahora capaz de todo. ¿Qué importancia ha tenido, por ejemplo, un partido como el de Sevilla?

Hay partidos claves en una temporada. Aparte de la eliminatoria contra el CSKA Moscú, ser capaces casi de igual a igual contra ellos, ganar en Sevilla, de la manera que ganamos tras llegar la noche anterior justo para cenar y después de haber hecho un partido muy serio, nos dio un plus de creer en nosotros y en lo que hacíamos y de confianza de cara a los siguientes partidos.

Lo que demuestra que las piernas van donde manda la cabeza.

Sí, la cabeza es fundamental en un deporte de precisión como el baloncesto. Pero como en todas las cosas de la vida: si estás alegre y feliz, las cosas salen más fácil. Si te enrocas en lo malo, todo se complica. Ese partido de Sevilla se añadió a que estábamos jugando bien y nos ha dado un nivel de confianza alto, pero que debemos mantener con el trabajo diario para evitar que lleguen derrotas y nos vuelva a bajar el ánimo.

El equipo es ambicioso y se marca la meta del cuarto puesto. Pero no está claro que eso vaya a servir de mucho.

Bueno, ganar partidos fuera de la cancha es complicado, pero la Liga va a ser la que nos diga en qué posición merecemos estar. Nos confundiríamos si empezamos a pensar en las consecuencias, en si competimos para una cosa o la otra. Hay que luchar cada día y darlo todo como siempre. Es la mentalidad que hay que tener porque es la única manera de ir construyendo un equipo sólido y reconocible en el futuro.

Pero después de todo lo que la afición ha vivido en la Euroliga, está deseando repetir y no es fácil.

No es bonito que cada año haya equipos con la licencia para la Euroliga, pero lleva tiempo así y los otros equipos lo tienen que asumir. Todo el mundo sabe lo complicado que está volver a la Euroliga, pero también lo era el año pasado y la hemos jugado. Ahora hay que tratar de seguir creciendo como equipo y como club y dar un pasito más, sea en Euroliga, en Eurocup o en Liga Endesa.

Esta incertidumbre, como el hecho de que varios jugadores acaben contrato, ¿puede influir en el final de curso, en que haya distracciones?

No lo creo porque el club lo lleva bien y aquí hay buena relación entre todos. En otros equipos en los que he estado quizás había menos feeling. Aquí hay buenos compañeros, tenemos amistad entre nosotros y eso se refleja en la cancha. Todo el mundo sabe lo que tiene que hacer y creo que cuando juegas, todo eso que has dicho es lo último en lo que piensas.

Su rendimiento particular está siendo muy alto en las últimas semanas. ¿Siente que está en una de sus mejores temporadas en la Liga?

No lo sé. El año pasado también fue una gran temporada, con la diferencia de que solo competimos en la ACB. Ahora, que el Bilbao Basket haya competido contra el CSKA Moscú por entrar en una Final Four es algo que se valorará con el tiempo. En ese sentido, todos hemos contribuido. Mi temporada es buena porque la del equipo lo es. Hay jugadores que harán más o menos números, pero si el equipo funciona bien todo va cayendo, como el dominó, y la aportación de todos parece mejor.

En su caso, lo mismo anota el triple agónico de Sevilla para ir a la prórroga que roza el triple-doble ante el Blusens Monbus.

Eso lo da la confianza. El triple de Sevilla lo podía haber metido otro, como ya ha ocurrido. Se trata de tomar decisiones, que a veces salen o no, y eso es lo que hace diferentes los juicios. Lo importante siempre es dar la cara para bien o para mal y asumir por igual críticas o halagos.

Pero ese buen rendimiento ha hecho que se hable de su posible regreso a la selección para los Juegos.

Algo he oído, pero estoy muy centrado en acabar bien la temporada. El año pasado decidí no ir porque sabía que esta temporada iba a ser dura. Pero ahora no me he planteado nada. Además, si empiezas a pensar en cosas que no controlas la concentración se te va. Y solo quiero pensar en ganar al Valladolid y lo que tenga que venir caerá por sí solo.