El padre de Damaris Egurrola levantó la liebre el pasado viernes, cuando reconoció en una entrevista concedida a la Cadena Ser que su hija no seguirá en el Athletic la próxima temporada. "Mi hija ya ha tomado la decisión y el 30 de junio, pase lo que pase, se marchará de este club", aseguró. Todo hace indicar que el destino de la joven centrocampista, una de las últimas perlas salidas de Lezama, será el Real Madrid y que en esa nueva andadura no irá sola, ya que Maite Oroz apunta en la misma dirección y hay voces que no descartan que incluso el entrenador rojiblanco, Ángel Villacampa, siga el camino de sus dos pupilas. Sea como fuere, tanto Egurrola como Oroz guardan silencio y son sus compañeras quienes están tomando la palabra en entrevistas y ruedas de prensa telemáticas.

Ayer fue el turno de Ainhoa Moraza, quien desde su casa respondió a diversas cuestiones lanzadas por periodistas y aficionados. Al ser preguntada por los rumores que sitúan a ambas futbolistas lejos de Bilbao el próximo curso, la joven defensa trató de salir del paso como buenamente pudo. "En temas personales no me voy a meter", expuso en primer lugar antes de agregar que "cada una es libre de elegir su futuro" y de recordar que "este equipo siempre ha salido adelante con las marchas que ha podido tener anteriormente". Además, quiso poner en valor el buen trabajo de cantera que se realiza en Lezama y que ayudaría a frenar una hipotética pérdida de potencial de cara al próximo curso. "Tenemos una muy buena cantera y se ha visto este año, en el que ha subido mucha gente al primer equipo y lo están haciendo muy bien. Nos tenemos que centrar en eso, el Athletic está haciendo un muy buen trabajo en la cantera".

Al margen de la casuística que podría producirse la próxima campaña con la marcha de sus dos compañeras al Madrid, Moraza considera que la apuesta de un club como el dirigido por Florentino Pérez en el fútbol femenino puede hacer "más competitiva la liga". "El Madrid es un gran club y aunque acaba de llegar al fútbol femenino y apenas le hemos visto, puede reforzar más la liga".

La futbolista donostiarra, que se estrenó con la selección española absoluta hace menos de un mes en la SheBelieves Cup disputada en Estados Unidos entre los días 5 y 11 de marzo, desveló que comenzó a jugar a fútbol por su hermano. "Él jugaba en el Antiguoko y en los descansos de los partidos la hermana de otro jugador y yo salíamos al campo a jugar. También empecé a correr alguna carrera. Pero en el Añorga se hizo una selección de niñas de 11 años. Nos presentamos 30 y nos eligieron a 20. Entonces tuve que elegir entre el fútbol y el atletismo y me apetecía más un deporte de equipo".

La donostiarra se formó en el Añorga, en el verano de 2012 fichó por la Real Sociedad, club con el que debutó en Primera División y tras tres campañas como txuri-urdin llegó al Athletic. Casi cinco años después de su primer partido con la zamarra rojiblanca, Moraza admite que se tomó los comentarios generados por su salida de la Real y posterior fichaje por el Athletic "con humor". "Eso se vive como quieras llevarlo tú. En mi entorno la mayoría son de la Real y me lo decían de broma. Fue una decisión mía, la correcta, la que quería. Los comentarios me daban igual. Estoy muy contenta de haber tomado esa decisión".

Tras conquistar la liga en su primera temporada como leona, el momento que Moraza considera como el "más bonito" de su aún corta carrera deportiva, la defensa rojiblanca sueña con ganar la Copa: "Sería increíble. Ya he ganado la liga con el Athletic y nos quedaría esta competición. Me haría mucha ilusión".