Nueva bomba en can Barça. Iñigo Martínez (Ondarroa, 1991) podría abandonar el club blaugrana en las próximas horas. Y es que el central vizcaino se encuentra en conversaciones con el Al-Nassr de Aymeric Laporte y de Cristiano Ronaldo. De hecho, las negociaciones entre las tres partes están tan avanzadas que son el motivo, además de la fatiga muscular a la que se aludió en los partes médicos del club, de que Iñigo no disputara los dos últimos amistosos del Barcelona.

Así pues, la llegada del defensa al Al-Nassr abre todavía más las puertas a Laporte para su salida del club saudí. El central de Agen es el eterno pretendido del Athletic y el refuerzo que ha de afrontar la Junta Directiva de Jon Uriarte como prioritario para paliar la escasez de futbolistas que tiene Ernesto Valverde en esa posición.

Y es que el fichaje de Iñigo hace ver que en Arabia Saudí ya dan por perdido a un Laporte que fue apartado de la concentración austríaca el Al-Nassr. Sin embargo, el central se encuentra en estos momentos en Portugal con su todavía equipo ya que, aunque no entrena junto a sus compañeros por unos problemas musculares, está a la espera de resolver su futuro cuanto antes.

Así pues, Laporte no ha disputado ni un solo amistoso de preparación con el Al-Nassr, lo que hace que no haya jugado un partido desde el pasado 30 de abril. Además, como si fuera un presagio, su todavía entrenador Jorge Jesús, aseguró antes de llegar a Portugal que “Laporte va a dejar el equipo y llegará otro defensa”. Dicho y hecho, a la espera de la confirmación oficial.

“Laporte va a dejar el equipo y llegará otro defensa”, aseguró Jorge Jesús, técnico del Al-Nassr

La necesidad apremia en el Athletic

Con todo, el defensa de Agen todavía tiene un año más de contrato con el club saudí y no está dispuesto a perder dinero a pesar de que Laporte desee volver al Athletic. Porque el internacional por España les costó 25 millones de euros. Sin embargo, el de Agen esta convencido de querer protagonizar una segunda etapa en el club rojiblanco y sabe que la actual situación del equipo de Valverde acentúa la necesidad de su fichaje.

Y es que a la suspensión de Yeray Álvarez por positivo en un control antidopaje por parte de la UEFA se le ha unido la baja de larga duración de Unai Egiluz, que el pasado miércoles fue operado con éxito de su rotura de ligamento cruzado. En ambos casos, todo parece indicar que los dos centrales se perderán una temporada que todavía no ha comenzado; por lo que Txingurri tan solo cuenta con dos jugadores de la primera plantilla en ese puesto: Vivian y Paredes.

Una permuta que se repite

No será la primera vez que Aymeric Laporte y Iñigo Martínez crucen sus caminos. Y es que el defensa ondarrutarra fue el escogido por el Athletic para hacer olvidar la marcha de Laporte al Manchester City. Fue en 2018 cuando el de Agen decidió poner rumbo a la Premier League después de seis temporadas como león, con 222 partidos y 10 goles. El club de Ibaigane ingresó 65 millones de euros por el traspaso del francés y, de ellos, destinó 32 para pagar la cláusula de un Iñigo Martínez que en esos momentos sobresalía en la Real Sociedad. Seis temporadas estuvo el ondarrutarra ejerciendo como jefe de la zaga rojiblanca, hasta que en verano de 2023 decidió no renovar su contrato y marcharse gratis al Barcelona.

Ahora, la situación es parecida, pero con el Al-Nassr como escenario. Porque la marcha de Laporte del club saudí ha propiciado la llegada de Iñigo. Con todo, la salida del vizcaino del can Barça, aunque parece avanzada, es toda una sorpresa. El central es del gusto total de un Hansi Flick que le colocaba siempre en el centro de una zaga compartida con Pau Cubarsí. De hecho, el ondarrutarra fue el titular indiscutible de campeón de Liga de la pasada temporada, con el que disputó 46 encuentros.

Sin embargo, los problemas económicos que atraviesa el club de Joan Laporta –esos por los que dicen que Nico Williams nunca llegó a fichar– hacen que la entidad blaugrana vea con buenos ojos la marcha del defensa ondarrutarra. Porque, aunque parece que el Al-Nassr no pagará ni un euro por Iñigo, el Barça liberaría 14 millones de fair play financiero procedentes de su sueldo y, así, podría inscribir a Joan García y Marcus Rashford.