Mucho tienen que cambiar las cosas para que algunos de los jugadores que salen de esta pretemporada con el papel de suplentes se puedan hacer un hueco entre los once titulares. Hay excepciones, claro, como en el caso de Berenguer, pero poco más. Si acaso el oportunismo de Guruzeta, aunque necesitó hasta tres ocasiones, dos de ellas muy claras, para marcar. El Liverpool, con un equipo plagado de suplentes y jóvenes que ni siquiera han alcanzado tal condición, pasó por encima de un equipo que concedió muchísimas facilidades en una defensa cogida con pinzas, con Lekue y De Luis formando como centrales y Gorosabel y Unai Gómez en los laterales.

La cosa empezó torcida, con dos goles en contra en un santiamén que dejaron cierta sensación de impotencia en el bando rojiblanco. Un error de Prados en el centro del campo propició el primero de ellos. Los centrales, Lekue y el joven De Luis, que bastante tienen con lo que tienen ante las numerosas bajas atrás, achicaron en exceso y permitieron que el jovencísimo Ngumoha tuviera mucho tiempo para pensar. Tanto, que se plantó al borde del área y remató junto a la cepa del poste, imposible para Padilla.

En el segundo también hubo bastante permisividad en defensa, algo de apatía incluso. Cierto es que no deja de ser un amistoso, pero un poco más de intensidad no habría estado de más. Una entrada del Liverpool al área del Athletic, un balón colgado al segundo palo al que no llegó a tapar Gorosabel y la anticipación de Darwin Núñez a Lekue dibujaron el segundo gol.

Sin juego, sin capacidad para generar peligro a través de la posesión, la respuesta de los leones llegó en forma de chispazos aislados, algunos más por demérito del rival que por méritos propios. Como el balón que estrelló Gorosabel en el larguero tras un par de malos despejes en el área del Liverpool. Fue, sin duda, la acción más peligrosa de los rojiblancos en la primera mitad, en la que solo Berenguer pareció tener una chispa distinta y, a ratos, Nico Serrano.

La primera mitad acabó con el tercer tanto en contra de la tarde. Unai Gómez, que estaba sufriendo como lateral zurdo para tapar al veloz Doak, no pudo frenar al extremo ‘red’, que se sacó un potente disparo desde dentro del área que habría acabado en saque de banda, pero que Padilla se introdujo en su propia portería al intentar rechazarlo.

LIVERPOOL: Woodman (Min. 46, Pecsi); Stephenson, Nyoni (Min. 67, Pilling), Robertson, Tsimikas; Jones (Min. 85, Laffey), Elliott, Mac Allister (Min. 57, Lucky); Doak (Min. 57, Danns), Ngumoha (Min. 67, Doherty) y Darwin Núñez (Min. 80, Koumas).

ATHLETIC: Padilla; Gorosabel (Min. 74, Johaneko), Lekue, De Luis, Unai Gómez; Rego (Min. 74, Vencedor), Prados (Min. 13, Robert Navarro), Vesga; Nico Serrano (Min. 74, Adu Ares), Guruzeta (Min. 85, Izeta) y Berenguer (Min. 85, Canales).

Goles: 1-0: Min. 2; Ngumoha. 2-0: Min. 5; Darwin Núñez. 3-0: Min. 42; Padilla en p.p. 4-0: Min. 58; Elliott. 4-1: Min. 76; Guruzeta.

Árbitro: Robert Jones (Inglaterra). Amonestó únicamente a Rego. 

Incidencias: Lleno en Anfield, con unos 61.000 espectadores, para presenciar el primero de los dos amistosos entre el Liverpool y el Athletic.

Otra lesión

Te puede interesar:

Un nuevo infortunio que sumar al de la lesión, otra más en esta pretemporada, de Prados. El centrocampista se marchó lesionado en el minuto 13 del partido y habrá que esperar al parte médico, pero a menos de dos semanas del inicio de liga, cualquier contratiempo muscular podría impedirle ser de la partida ante el Sevilla.

La segunda mitad no tuvo mucha historia. El Liverpool acumuló alguna llegada para hacer trabajar a Padilla, que no pudo hacer nada para evitar el cuarto de la tarde, y Guruzeta, tras errar un mano a mano, se desquitó con un gol de cabeza tras un rechace. Ni los cambios surtieron efecto en una tarde que al menos dejó el debut de Johaneko. Hay trabajo entre la segunda unidad.