El futuro más inmediato de Álvaro Djaló (Madrid, 16-VIII-1999) podría pasar por el fútbol catarí. Tal y como ha avanzado este domingo Onda Vasca y pudo confirmar este periódico, el Athletic negocia la cesión del extremo con el Al-Gharafa, equipo de la máxima categoría de Catar y en el que militan, entre otros, Joselu Mato y el central vizcaino e internacional por Palestina Yaser Hamed. Dirigido por el técnico portugués Pedro Martins, el conjunto asiático ha puesto sus ojos en el extremo nacido en Madrid que cumplirá próximamente 26 años y que el sábado no tuvo minutos en el primer amistoso de pretemporada del Athletic. Una circunstancia que pudo ser debida a las negociaciones existentes entre ambos clubes. Entre los convocados, el atacante no fue el único que no jugó, ya que tampoco participaron ante la Ponferradina el central Unai Egiluz y el centrocampista Unai Vencedor.
El conjunto rojiblanco busca un acuerdo que resulte lo más satisfactorio posible para sus intereses, tal y como hiciera recientemente con la salida de Julen Agirrezabala al Valencia. Con Djaló se podría repetir la fórmula, esto es, que Al-Gharafa se responsabilice de abonar de manera íntegra la ficha del jugador y que, además, pague un fijo para que cristalice la operación. Asimismo, se podría incluir una opción de compra que, según apuntan, sería de unos 10 millones de euros.
Cabe recordar que el Athletic fichó al jugador hace poco más de un año -su anunció se hizo público el 4 de marzo de 2024- después de hacer un fuerte desembolso de 15 millones e incluir en el acuerdo con el Braga unos variables de 5,5 kilos.
A pesar del elevado coste del fichaje, hasta el punto de que se convirtió en el tercer futbolista más caro en la historia de la entidad bilbaina, por detrás de Iñigo Martínez (32 millones) y Yuri Berchiche (24,75), el rendimiento de Djaló en la primera de las cinco temporadas por las que firmó con el Athletic fue bastante pobre.
Nunca se le vio cómodo sobre el campo. Las buenas sensaciones que dejó en pretemporada se desvanecieron con una inoportuna lesión a pocos días de empezar el curso y nunca consiguió darle la vuelta a la situación. Acabó la campaña con 28 encuentros disputados (17 de liga, competición en la que firmó su único gol, 8 de Europa League, 2 de Copa y 1 de Supercopa) pero menos de 1.000 minutos de juego, 976 en concreto.
La elevada competencia en las bandas, con indiscutibles como los hermanos Williams y un futbolista siempre preparado como Alex Berenguer, tampoco le ha ayudado a un Djaló que nunca respondió a las esperanzas depositadas en él y que parecía jugar bloqueado. De ahí su más que posible salida en los próximos días. Eso sí, se irá lejos, a una liga de un nivel muy inferior a las de primer orden europeo y a un fútbol y un país totalmente nuevos para él.
Descontentos
El rendimiento ofrecido por el futbolista no gustó a los responsables deportivos, con Mikel González a la cabeza, y así lo hizo público a la conclusión de la temporada: “No estamos contentos con la temporada de Djaló porque él es el primero que no está contento por no llegar a su nivel. Tuvo la desgracia de lesionarse en la anteúltima semana de pretemporada y lo acusó en el inicio”. El director de fútbol recordó que “muchos clubes europeos pujaron por él. Venía de una gran temporada en el Braga, de meter goles en la Champions y teníamos que pelear porque se incorporase al club”.
Ahora, su más que posible cesión al Al-Gharafa, que sería la segunda salida en el primer equipo del Athletic tras la marcha de Agirrezabala al Valencia, permitirá a Ernesto Valverde aligerar su amplia plantilla y, de paso, la situación de otros futbolistas como Nico Serrano o Aingeru Olabarrieta podría cambiar. El primero, de quedarse, contaría con más opciones para entrar en la rotación y el segundo vería con más facilidad alternar el Bilbao Athletic con el primer equipo. Todo ello, claro, a la espera de ver qué sucede con el futuro de Malcom Adu Ares, curiosamente primo de Djaló, ya que además de los Williams y Berenguer, el técnico tiene también a Robert Navarro para jugar en banda.
