Ha extrañado mucho porque durante toda la jornada el ambiente ha sido festivo. Pero minutos antes de comenzar el encuentro entre el Athletic y el Slavia Praga correspondiente a la tercera jornada de la fase de la liga de la Europa League, han habido altercados dentro de San Mamés. Ha sido en el sector de la grada destinado a la afición visitante, es decir, ha sido entre los aficionados checos. Lo que extraña todavía más. Sea como fuere, todo ha quedado en nada y el colegiado danés Marten Krogh ha pitado el inicio puntual, a las 21.00 horas, como a las televisiones les gusta.
Son más de 1.200 los seguidores del Slavia que se han desplazado hasta Bilbao para disfrutar del partido ante el Athletic y la mayoría de ellos acudieron a la llamada realizada por el grupo de animación del club, Tribuna Sever. Así, a las 17.30 horas, la plaza San Pedro de Deusto se convirtió en el centro neurálgico de la afición checa. Todos de negro, como les pidió el club los días anteriores, agotaban los minutos antes de poner rumbo a San Mamés.
Lo hicieron a través del puente Euskalduna y entre cánticos y bailes. Los zurigorris que se encontraban les aplaudían el entusiasmo y, antes de entrar en La Catedral, por las puertas 21 y 22, fueron sometidos a unos exhaustivos cacheos. Todo iba en orden y según lo que debe ser la fiesta del fútbol hasta que en los prolegómenos del partido, varios aficionados del Slavia se han enzarzado en su grada.
