Aún recapacitando sobre lo ocurrido, el alzamiento del título de Copa cuarenta años después, sin tiempo de digerir la gesta del Athletic, cuya propia tardanza indica la dificultad de alcanzarla, ahora la atención del mundo athleticzale se centra en el siguiente paso del cauce del éxito, que es la celebración, digamos que la gran celebración: la navegación de la gabarra por la ría del Nervión, que según relatan las crónicas, el 7 de mayo de 1984 congregó a un millón de personas en los márgenes fluviales.
Aquel barco –que realmente es un pontón, una plataforma flotante que carece de propulsión y mando–, la gabarra número 1 rebautizada como Athletic Club y que aguarda en el Museo Marítimo de Bilbao, volverá a surcar las aguas el próximo jueves, día 11, partiendo a las 16.30 horas desde el Real Club Marítimo del Abra hasta alcanzar el Ayuntamiento de Bilbao sobre las 18.30, cuando los jugadores ofrecerán el título a la afición. Media hora más tarde, la gabarra retornará aguas abajo hasta alcanzar El Abra sobre las 19.30. Lo hará inmaculada, remozada y casi como recién salida de los Astilleros Celaya en 1960 para que los aficionados puedan manifestar su alegría en compañía de los protagonistas que han traído la felicidad a miles de hogares.
Este lunes será la botadura
Precisamente este lunes se procederá a la extracción de la gabarra del dique del Itsasmuseum para trasladarla a las aguas de la ría. La maniobra comenzará a primera hora de la mañana y se llevará a cabo con una grúa de grandes dimensiones que se prevé que tardará varias horas en reubicar la embarcación. Una vez a flote, solo quedará dirigirla hacia El Abra.
La inquietud que aflora es desde dónde disfrutar del histórico momento, que tuvo su primer precedente en 1983, cuando el entonces presidente del club, Pedro Aurtenetxe, recurrió a la creatividad y decidió celebrar por la ría el séptimo título de liga, logrado por el equipo de Javier Clemente, que un año después repetiría navegación con el ‘doblete’ de liga y Copa.
La parroquia rojiblanca se debate sobre qué punto de la ría escoger para contemplar el paso de los campeones. Las estampas de 1984 hacen pensar que ocupar un hueco en primera fila de las orillas de la ría será complicado. La masificación está garantizada. Algunas empresas y centro educativos ya han comunicado que concederán tiempo libre para acudir a la cita, como también sucedió en el emocionante y multitudinario 84.
Otros, privilegiados, se decantarán por acompañar a la comitiva embarcados. El Athletic, en acuerdo con las autoridades marítimas, ya estableció un protocolo de actuación y anunció que el número de barcos que surcarán la ría estará limitado, que existirán tramos de navegación con diferentes costes en función de las distancias y que habrá que pagar una cuota de inscripción variable según el tipo de embarcación y su número de pasajeros.
Las condiciones establecidas generaron malestar en un sector de los aficionados, que consideran que se ha reservado la posibilidad de acompañar al Athletic a los pudientes en lugar de proceder a la selección con un sistema plural. La Autoridad Portuaria salió al paso de la polémica y se desmarcó de la decisión de los cobros, una responsabilidad que corre a cargo del club, gesto que fue considerado abusivo y con afán recaudatorio. Según informó la entidad presidida por Jon Uriarte, las embarcaciones deportivas sin fines lucrativos pagarán 250 euros, los buques de pesca deberán abonar 500, las embarcaciones deportivas de recreo desembolsarán 1.500 euros y los barcos de transporte de pasajeros o de mercancías tendrán una cuota de 3.000.
Además, los barcos pagarán hasta 200 euros por pasajero que lleven a bordo en caso de que tengan fines lucrativos. Desde el club se anunció también que el 50% de la cuota de participación deberá ser abonado, mediante transferencia bancaria, a la aceptación del derecho, ya sea como consecuencia del sorteo o por adjudicación directa. Esta confirmación fue solicitada en la semana previa a la final de Copa y el abono sería devuelto en caso de que la concentración no se celebrase. El 50% restante debía ser abonado después de la final de Copa.
A falta de confirmación oficial, la cantidad de embarcaciones que podrán surcar la ría apunta a unas 160. En caso de que las solicitudes superasen el número permitido, se celebraría un sorteo que en principio estaba previsto para dos días después de la final, es decir para este lunes.
Tal y como se advirtió desde el club, estará prohibido el baño y la navegación con piraguas, tablas, pequeños botes, embarcaciones a vela o neumáticas con un eslora inferior a los seis metros. Asimismo, estará prohibido el amarre o fondeo a lo largo de la ría y las rampas o escaleras de acceso al agua deberán permanecer desalojadas para poder proceder a un hipotético rescate y evacuación.
Así, los athleticzales aguardan ansiosos por disfrutar de una jornada en la que se concentrarán todos los actos y que sin duda será histórica. “En esa fecha, por fin, después de 40 años y seis finales consecutivas perdidas, la gabarra volverá a surcar la ría con un equipo campeón a bordo para celebrar la victoria junto a la familia athleticzale”, se manifestó desde el Athletic.
Actos institucionales posteriores a la navegación de la gabarra
Después de que la gabarra complete su recorrido será el turno de los actos institucionales. Sobre las 19.00 horas el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, recibirá a los campeones en las escalinatas del Ayuntamiento. Luego se accederá en el Salón Árabe del consistorio, donde se pronunciarán los discursos protocolarios para después asomarse a la balconada. Seguido, entre las 19.30 y las 20.00 horas, la plantilla se dirigirá en autobús por el Arenal y la Plaza Circular hasta la Diputación Foral de Bizkaia, donde la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe, recibirá a los campeones en el salón de recepciones para de nuevo llevar a cabo los discursos protocolarios y cerrar los actos institucionales con el saludo desde la balconada del edificio de la Diputación.
