Athletic Hiria ya está abierta. El recinto destinado a la afición rojiblanca en Sevilla, ubicado en el Solar de las Banderas, fue inaugurado doce interminables minutos tarde, a las 11.42 horas, con el himno cantado por los seguidores de forma espontánea y a pleno pulmón. Pero segundos después ya estaba siendo estrenada por los primeros seguidores que, como buenos vizcainos, fueron directos a la barra. Tras varios días de turismo por la ciudad hispalense y de atestar las calles, los bares y los restaurantes de su centro histórico, los athleticzales por fin tienen su espacio. Se trata de una superficie de 28.000 metros cuadrados que, viendo sus primeros minutos de vida, puede quedarse pequeña para la marabunta que se espera puesto que su capacidad es para 40.0000 personas.

Y es que mucho antes de la apertura, cuando Doctor Deseo todavía estaba con sus pruebas de sonido, centenares -por no decir la bilbainada de miles- ya se reunían alrededor de la puerta de entrada con muchísimas ganas de entrar y de pasarlo bien. Desde la Torre Sevilla, que mira la ciudad desde sus 180 metros de altura, solo se veía rojiblanco.

Así, otra de las preocupaciones de los primeros inquilinos de Athletic Hiria es que si sus puertas se abrieron bastante puntuales, también se cerrarán con la misma diligencia. Y es que está previsto que la fiesta en la zona rojiblanca se prolongue hasta las 2.00 horas en caso de que los de Ernesto Valverde levanten el trofeo, un momento de la madrugada en el que para muchos la noche todavía es joven.

Sin embargo, para que se dé ese supuesto todavía quedan muchas horas de disfrute en Athletic Hiria, que se presenta con una programación variada y entretenida. La izada de bandera realizada por el presidente del Athletic Jon Uriarte da paso a los bertsos de Jon Maia y después tendrán lugar las actuaciones musicales de DJ Gaztea, Henry Méndez, Oxabi, Doctor Deseo y MCD.

Con todo, por lo visto en los primeros instantes de vida de Athletic Hiria, la joya de la corona será la barra de 170 metros, más larga que San Mamés, tras la que trabajarán unos 200 camareros con un sinfín de cañeros de cerveza. Aún no se sabe si serán suficientes para aliviar los 30 grados que se esperan, pero por si acaso también son de agradecer ya desde la inauguración las dos carpas instaladas para cobijarse de toda la solana. Seis food trucks y un puesto de talos servirán para matar el hambre y coger fuerzas para los 3,3 kilómetros o los 45 minutitos que separan la zona rojiblanca de La Cartuja. Y para los que no tengan la suerte de tener entrada, la fiesta seguirá en Athletic Hiria, con la retransmisión del partido en pantallas gigantes y un DJ que, ojalá, tenga trabajo hasta las 2.