Medir la euforia, controlar las emociones tras el importantísimo y sufrido triunfo del miércoles en el Metropolitano en el encuentro de ida de las semifinales de Copa y volver a poner los pies en la tierra son cuestiones que deberá controlar el cumpleañero Ernesto Valverde, quien ayer sopló las velas de su 60 aniversario. La liga sigue adelante, no se toma un respiro, y el Athletic tiene que ser consciente de la importancia de un campeonato en el que tiene más o menos bien encarrilado cumplir con su objetivo. Ya avisó a principios de semana el presidente, Jon Uriarte, que lo más importante es la liga y con esa realidad se reencontrará el conjunto rojiblanco pasado mañana, diez días después de golear al Mallorca (4-0). Los leones visitarán al Almería, el único equipo que no conoce la victoria en el torneo de la regularidad y que es colista con solo seis puntos, en la que es la asignatura pendiente y donde más margen de mejora se le intuye al equipo: sus encuentros a domicilio.

Se podría decir que las sensaciones son unas, pues la imagen ofrecida frente a Valencia y Cádiz dejó bastante que desear; y que la realidad es otra, pues pese a lo expuesto, el Athletic es el quinto mejor visitante del campeonato al haber sumado 16 puntos en once partidos, registros que solo mejoran el Real Madrid (29), el Girona (27), el Barcelona (23) y la Real Sociedad (17), aunque madrileños y donostiarras han disputado un choque más.

Claro que entre medias también hay lugar para los grises, como en casi todas las cuestiones de la vida. Para empezar, el conjunto rojiblanco solo ha sido capaz de ganar uno de sus cinco últimos duelos lejos de San Mamés, dos si se eleva el registro a seis, pero en ese mismo tramo solo ha caído derrotado en una ocasión. En total, en lo que va de liga, su balance a domicilio es de cuatro victorias, otros tantos empates y tres derrotas.

El Athletic se estrenó lejos de Bilbao con un derbi ante Osasuna, el equipo que fue su bestia negra el pasado curso y al que fue incapaz de ganar en los cuatro encuentros en los que se enfrentaron, con mención especial a la eliminación en las semifinales de Copa. Este curso, al menos, se pudieron tomar su particular revancha al imponerse por 0-2. Tras Iruñea, tocó Mallorca, donde no se movió el marcador. Al contrario que frente al Alavés en Mendizorrotza, donde los leones calcaron el resultado logrado contra Osasuna.

La primera derrota del curso lejos de Bilbao llegó en otro derbi, ante la Real Sociedad (3-0), a la que le siguió la segunda, esta vez frente al Barcelona y por la mínima (1-0). El triunfo en Vila-real (2-3), donde el equipo ofreció dos versiones muy distintas, una primera parte muy buena y una segunda bastante mejorable, puso fin a los dos malos resultados y dio paso a los cinco últimos compromisos ligueros del Athletic lejos de su campo: Girona (1-1), Granada (1-1), Sevilla (0-2), Valencia (1-0) y Cádiz (0-0). 6 puntos sobre 15.

Mejorar las sensaciones de sus dos últimas salidas se antojará vital si el conjunto rojiblanco quiere regresar de Almería con los tres puntos. Entre otras cosas, porque ante el Cádiz no llegó a rematar entre los tres palos. Por muy mal que le vayan las cosas al equipo que dirige Gaizka Garitano, ya demostró frente al Real Madrid que tiene argumentos para inquietar a cualquier rival. Al menos, si el árbitro se lo permite.

Seis puntos perdidos

Además, el Athletic no puede permitirse más lujos de dejarse por el camino puntos que se presumen asequibles por la entidad de sus contrincantes. Hasta le fecha no le ha ido nada bien cuando se ha medido a los equipos de la parte baja de la clasificación jugando lejos de Bilbao, pues solo ha sumado tres puntos ante tres de los cuatro últimos (Mallorca, Granada y Cádiz) o, lo que es lo mismo, ha perdido seis, y ahora recibe al colista. Además, frente a los tres rivales citados únicamente ha sido capaz de recibir un gol. Al menos, ha encajado idéntico número.

Afinar la puntería lejos de San Mamés es otra de las cuestiones a mejorar por los pupilos de Valverde, que hasta la fecha se han quedado sin marcar en cinco de los once partidos, de los que tres se saldaron con derrota y dos, con empate.

En total, el Athletic ha marcado once goles en otros tantos encuentros, lo que le convierte solo en el décimo tercer equipo más anotador del campeonato actuando como visitante. Por detrás, por ejemplo, del Almería. Eso sí, a nivel defensivo únicamente le supera el Real Madrid, que ha encajado ocho goles, por los nueve de los rojiblancos. En definitiva, si hay margen de mejora para este Athletic, está lejos de Bilbao.