El Athletic camina con paso firme en liga, donde está firmando un ilusionante arranque de temporada a pesar de que antes de vencer el domingo al Villarreal había encadenado cuatro jornadas sin conocer la victoria, lo que se tradujo en un pobre bagaje de dos puntos sobre doce posibles. El triunfo ante el equipo de Quique Setién, sin embargo, ha vuelto a inflar el globo de la ilusión, que se había deshinchado un poco y la normalidad vuelve a reinar en lo deportivo. También la tranquilidad es máxima en lo institucional, apartado este en el que Jon Uriarte y su Junta Directiva recibieron el respaldo masivo de los socios compromisarios en la Asamblea General Ordinaria celebrada el pasado miércoles en el Palacio Euskalduna. Una cita que fue como una balsa de aceite y en la que solo intervinieron unos pocos compromisarios. Eso sí, uno de ellos interpeló a la Junta Directiva por las dificultades que están encontrando los aficionados para poder ver los entrenamientos de la primera plantilla, que se ha bunkerizado en Lezama y prácticamente todas sus sesiones se desarrollan a puerta cerrada.

Este viernes, coincidiendo con el partido del Athletic ante el Girona en Montilivi, se cumplen cuatro meses del primer entrenamiento del curso del conjunto rojiblanco, que arrancó la pretemporada en Lezama el 4 de julio bajo la tutela de Ernesto Valverde, quien dio inicio así a su tercera etapa en el banquillo de San Mamés. Los futbolistas se dieron un baño de masas en su primer día de trabajo tras las vacaciones, pues las instalaciones deportivas acogieron a un nutrido grupo de aficionados, muchos de ellos niños, que no quisieron perder la oportunidad de acercarse a ver a sus ídolos. Una situación que se repitió en otras dos ocasiones esa misma semana, en la que el cuerpo técnico decidió abrir las sesiones matinales del miércoles y el viernes y cerrar las vespertinas de esos mismos días.

Parecía que con la llegada de un viejo conocido de la casa, que tiene un conocimiento absoluto de la idiosincrasia del club, cambiaría una dinámica que ha ido a más en los últimos años, cuestión esta en la que la pandemia del coronavirus tampoco ha ayudado en exceso. Pero nada más lejos de la realidad. En estos cuatro meses se contabilizan un total de 80 días de trabajo en Lezama y 86 entrenamientos, de los que solo 12 (el 14%) se han desarrollado abiertos al público y 74 a puerta cerrada. En lo que a la prensa respecta, el club habilita los primeros 15 minutos de cada sesión para que puedan tomar fotos y echen un vistazo de los futbolistas que toman parte de la misma. Eso sí, nadie garantiza que quien no haya iniciado el entrenamiento se incorpore después, o viceversa. Esa manera de proceder con la prensa se da, por lo general, en la mayoría de jornadas salvo en las previas de los partidos, en las que se ha perdido esa vieja tradición y no se puede presenciar ese cuarto de hora inicial.

La mitad, en julio

A la primera semana de entrenamientos le siguió una segunda que arrancó con una doble sesión el lunes día 11, fórmula que se repitió el miércoles. En ambas ocasiones el público pudo seguir las andanzas de los leones en horario matutino, no así en las vespertinas de esos días, ni tampoco en las del martes, jueves, viernes y sábado, fecha en la que partieron a Alemania, donde realizaron el stage de pretemporada. A la conclusión del mismo, tras dos días libres, la plantilla regresó al trabajo en Lezama el martes día 26, la última sesión con público de julio.

De los doce entrenamientos en los que las puertas de las instalaciones deportivas han estado abiertas a los aficionados, la mitad se contabilizan en el mes de julio. Tres más se celebraron en agosto (días 2, 22, esta tras el choque ante el Valencia en San Mamés, y 31) y la terna restante en septiembre (días 7, 22 y 23).

Por lo tanto, hace más de un mes que los hinchas rojiblancos no pueden seguir en directo los entrenamientos de la primera plantilla del Athletic. Las dos últimas sesiones que se celebraron a puerta abierta, las de los días 22 y 23 de septiembre, coincidieron con la semana de parón de las selecciones, en la que Valverde no pudo contar con Unai Simón ni los hermanos Williams, que fueron citados por las selecciones de España y Ghana para ultimar la preparación de cara al Mundial de Catar que arranca el próximo día 20.

Antes del parón, el Athletic disputará tres partidos (días 4, 8 y 13), por lo que es probable que haya que esperar a que los futbolistas regresen de sus vacaciones –Valverde les concederá unos diez días– para ver si la afición puede acudir a Lezama con mayor asiduidad. Mientras crece la asistencia a San Mamés, algo que Jon Uriarte ha puesto en valor, el conjunto rojiblanco se bunkeriza en Lezama.

Los datos

Julio. El Athletic arrancó la pretemporada el día 4 en una jornada a puertas abiertas a la que acudió numeroso público. Ese mes se abrieron un total de cinco sesiones más, para un total de seis, la mitad del total.

Agosto. El segundo mes de entrenamientos y en el que arrancó la liga para el Athletic con la disputa del partido ante el Mallorca el día 15. En agosto se abrieron tres entrenamientos al público.

Septiembre. El último mes en el que ha habido aficionados en Lezama. Tuvieron tres días: 7, 22 y 23. Estos dos últimos, coincidiendo con el parón por los compromisos de las selecciones.

Octubre. El primer mes sin entrenamientos a puerta abierta en Lezama.

Noviembre. Por lo pronto, el mes ha arrancado sin sesiones con presencia de aficionados.