Las bandas son el lugar más apartado, donde uno puede sentir marginación, donde uno aguarda sin saber cuándo llegará esa pelota que haga entrar en acción. Las bandas se entregan porque se consideran territorios inhóspitos, menos amenazantes. Son las primeras zonas que se ceden en una batalla con balón. Son, del algún modo, los arrabales del fútbol. Pero a la vez son parte imprescindible del juego. Es cuestión de saber sacarlas partido.

En el Athletic hay dos chicos, cachorros, que están sacando provecho de esos recónditos lugares. A falta de fichajes -solo el de Alex Petxarroman-, porque las arcas flaquean y el mercado es raquítico, para el club bilbaino es necesario mirar hacia donde siempre miró: Lezama. Del Bilbao Athletic proceden dos jóvenes que están pateando las puertas del primer equipo. Nico Serrano (5-III-2003, Iruñea) y Nico Williams (12-VII-2002, Iruñea) golpean con fuerza. Y lo hacen desempeñando funciones en esas bandas a las que están dando valor y sentido en el juego del Athletic.

Cierto es que Marcelino García Toral rehuye de citar con nombre a quienes ha solicitado para realizar la pretemporada con la élite del club. Opta por hablar en términos generales, seguramente para no endiosar a unos y en consecuencia no minar la moral de otros. Por cautela. "Con los chicos jóvenes tenemos que ser siempre prudentes, darles su espacio y su tiempo", dijo tras medirse al Sankt Gallen, donde los Nicos se hicieron notar. Williams, en concreto, propició con un centro suyo el gol en propia puerta del equipo suizo. Serrano dispuso de ocasiones de gol, lo que confirma su saber estar en el lugar adecuado y en el momento preciso.

En los dos partidos de pretemporada disputados por el Athletic -y en los entrenamientos-, han llamado la atención. Han aportado minutos de calidad y proyectado virtudes que no abundan en el equipo, y en el fútbol en general, donde los extremos son en muchos casos jugadores reconvertidos. Ejercen desde una posición que se encuentra en peligro de extinción. "Tenemos futbolistas con un gran futuro, que son muy trabajadores y con muy buena capacidad", expresó Marcelino tras enfrentarse al Dinamo Kiev. Un discurso proyectado en términos grupales, nunca ensalzando la individualidad.

Ambos están ejerciendo desde los costados, Serrano en el flanco izquierdo y Williams ensanchando el esquema táctico de Marcelino, en esos lugares que pueden ser inhóspitos pero que ellos están dando sentido y valor, demostrando que pueden trasladar peligro con sus botas, enriqueciendo al colectivo. En el Athletic no hay excedentes de gol ni dribling.

Ellos, a juzgar por datos recientes y ocasiones generadas en el stage en Suiza, stageposeen virtudes para fabricar situaciones de gol. Apelando a sus hojas de servicios, se hallan cifras interesantes y nada lejanas. Serrano marcó 14 goles en 19 partidos en la 2019-20 con el Juvenil y Williams firmó 9 tantos en 26 compromisos con el Bilbao Athetic durante la pasada temporada.

descarados

Por otro lado, se han mostrado dotados de capacidad técnica, velocidad y desparpajo, porque esquivan los cánones del joven jugador cumplidor que sacrifica su personalidad buscando satisfacer al míster sin pérdidas de balón. Ellos arriesgan encarando al rival y logran sacar provecho de esas zonas menos pobladas del campo.

Si los dos ilusionaron contra el Sankt Gallen, Williams repitió ante el Dinamo. Entró en la segunda mitad y aportó ritmo y verticalidad, lo mismo que se atisba en los ejercicios preparatorios, donde también destaca Serrano. Ellos desahogan a un centro del campo que denota cierta falta de fluidez a estas alturas del verano. El equipo agradece esa osadía muy propia de la juventud, pero que es necesaria cuando a un equipo le falta capacidad para progresar con el balón hasta alcanzar situaciones de peligro. Sin duda, están aportando alternativas al vestuario.

No obstante, es evidente la falta de madurez en ambos, todavía con cuerpos por desarrollar. Ceden en los contactos físicos. Asimismo, deben asimilar conceptos tácticos y participar en mayor medida en labores defensivas, de destrucción. En su beneficio, cierto es, está el hecho de que una pérdida de balón en la banda reduce el impacto con respecto a otras posiciones. Ellos pueden arriesgar más que otros y esto favorece el lucimiento. Pero no todo el que arriesga gana, y Serrano y Williams están teniendo una incidencia llamativa por los beneficios de sus acciones. Son un aire fresco que ha puesto de moda el nombre Nico.

En Saint Mary's. Otro rival de altura para el Athletic en la pretemporada. Los de Marcelino, un día antes de medirse al Liverpool en Anfield, se enfrentarán al Southampton en el estadio Saint Mary's el próximo 7 de agosto, sábado, a partir de las 16.00 horas. Previamente, el conjunto bilbaino jugará otros dos partidos. El sábado cerrará en el stage en Suiza ante el Borussia Dortmund y el día 31 visitará al Unión Berlin.