Después de perderse por una sobrecarga muscular el derbi contra Osasuna en San Mamés y de verse fuera de la convocatoria para visitar a la Real Sociedad, Unai López afronta con ganas e ilusión la cita de mañana ante el Alavés en Mendizorrotza, donde el centrocampista donostiarra aspira a volver a tener minutos tras quedarse con las ganas en los cuatro últimos partidos. Su última aparición, al ver también desde la distancia los encuentros coperos frente al Barcelona y el Granada en San Mamés, se remonta al pasado 2 de febrero ante el Getafe, choque en el que el conjunto azulón se impuso por 0-2 y en el que el 8 del Athletic fue sustituido en el minuto 67 por Ibai Gómez.

Tres semanas después, Unai López, titular en 15 de los 16 partidos de liga que ha disputado esta temporada, de los cuales solo ha completado cuatro para sumar un total de 1.093 minutos en el campeonato de la regularidad, afirmó ayer encontrarse "en perfectas condiciones" para volver a la acción contra el Alavés y "tranquilo" en medio de un incierto escenario en el plano individual, toda vez que la alianza en la zona ancha entre Dani García y Mikel Vesga ha ganado enteros en las últimas semanas. Con la irrupción del cachorro Unai Vencedor y la alternativa de Mikel San José como opciones también para Gaizka Garitano a la hora de diseñar un solvente centro del campo, Unai López admitió que "no me gusta no jugar, pero trabajo para poder hacerlo y el resto está en las manos de Gaizka; yo no puedo hacer mucho más".

"Me encuentro muy cómodo cuando consigo elaborar jugadas con Iker, sobre todo, porque me entiendo muy bien con él. Defensivamente creo que también he hecho un buen trabajo e intento hacer lo que me pide el míster", apuntó asimismo el guipuzcoano al ser cuestionado por sus sensaciones en el terreno de juego, del mismo modo que reconoció en relación a la incidencia en su juego del sistema con cuatro o cinco defensas que "cuando he jugado lo he hecho más con defensa de cuatro. Con cinco, creo que solo en Tenerife y duró dos minutos, por lo que no sé qué decir, aunque lo que mejor me ha venido hasta hoy en día es la defensa de cuatro".

"Aun así, el equipo está funcionando muy bien, tenemos gente muy buena atrás y el que decide es Gaizka", puntualizó un sereno Unai López, consciente de la importancia de sumar mañana los tres puntos en Mendizorrotza para "romper la mala dinámica de resultados en liga". "Sabemos que el Alavés en su casa es un equipo duro, pero hemos preparado bien el partido y vamos con las ganas de sacar tres puntos importantes para nosotros", subrayó el rojiblanco. "También sabemos lo que significa jugar allí y más cuando juegan contra nosotros, pero no nos puede pesar esa presión", advirtió el donostiarra, consciente de que "estamos dando mucha importancia a la Copa por dónde estamos ya, pero también hay que ganar en liga y es mejor llegar a ese partido de semifinales contra el Granada ganando y no con una mala racha de resultados".

LA BALA DE LA COPA Cuestionado por el momento actual del equipo, Unai López no ocultó que "si no estuviéramos en semifinales de Copa, la situación sería más preocupante, pero no estamos en una buena dinámica en liga y no queremos estar así, porque los puestos de Europa se nos han alejado un poco, aunque quedan muchas jornadas, no nos vamos a rendir y pelearemos por ellos". "En los partidos nos ha faltado el gol y todo el mundo tiene algún momento de debilidad o de pasar un mal rato, pero creo que el equipo nunca ha demostrado ser débil mentalmente", reivindicó el guipuzcoano.