MÁS de medio siglo después, Athletic y Granada volverán a verse las caras en una semifinal de Copa. No figuraba desde entonces en la antesala de la gran final el equipo nazarí, que mordió el polvo en su intento de luchar por el título en julio de 1969 al caer derrotado a doble partido a manos del conjunto rojiblanco, que se llevó el gato al agua tras empatar a un gol en su visita a Granada y vencer 2-0 en el choque de vuelta disputado en San Mamés. En ambos encuentros, sellados con el preciado pasaporte hacia la final en la que los pupilos de Rafa Iriondo vencieron 1-0 al Elche para proclamarse campeones en el Santiago Bernabéu, fueron titulares Javier Clemente (Barakaldo, 12-III-1950), Iñaki Sáez (Bilbao, 23-IV-1943) y José Mari Argoitia (Galdakao, 18-I-1940).

Los tres, con el foco puesto en la inminente cita copera ante el cuadro andaluz en busca de un nuevo billete para la final, pero con el pasado recuperando su protagonismo en el presente, recuerdan con DEIA las dificultades halladas en 1969 para tumbar al equipo nazarí, que finalizó la liga en octava posición con un punto más que el Athletic, undécimo, y que alcanzó las semifinales tras dejar en la cuneta a Sabadell y Málaga. Los bilbainos, por su parte, habían superado a Zaragoza y Deportivo antes de plantarse en una semifinal en la que Clemente vio portería en la ida y Argoitia, junto a Uriarte, en la vuelta. "Recuerdo que marqué, efectivamente, aunque ha pasado ya mucho tiempo", apunta el propio Argoitia, quien no ha olvidado que aquel Granada "tenía un equipo fuerte y no fue fácil para nosotros eliminarlos, como nunca lo suele ser superar una semifinal, pero lo conseguimos".

"Jugar la vuelta en San Mamés nos ayudó, porque en la ida no pudimos pasar del empate allí", recuerda asimismo el de Galdakao, que se declara "optimista" para la semifinal que arrancará el próximo miércoles en La Catedral frente a un Granada al que Iñaki Sáez también confía en que superen los de Gaizka Garitano. Al echar la vista atrás y recordar la doble cita copera de hace 51 años, el bilbaino bromea al indicar que "si hubiera marcado algún gol también, me acordaría mejor, pero como no los metía?". "Es cierto que ellos tenían un buen equipo y fueron muy consistentes durante toda la temporada. También en la Copa, donde venían de hacer bien las cosas, por lo que fue una eliminatoria igualada y competida", manifiesta Sáez, quien resalta que "lograr aquel empate en su estadio nos dio fuerza y moral para la vuelta, al saber que íbamos a jugar en San Mamés con el apoyo de nuestra gente, lo cual era una baza importante para nosotros".

"Teníamos un equipo fuerte, con una alineación que se aprendió la gente de memoria, al igual que nosotros, que también la sabíamos de carrerilla", agrega Sáez, que subraya la importancia de ir "paso a paso" y "no pensar en la final antes que en esta semifinal". En ello hace hincapié también Clemente, autor del gol que dio el empate al Athletic en el estadio del Granada el 1 de junio de 1969. "Creo que marqué desde fuera del área, aunque no recuerdo bien", admite el de Barakaldo, quien sí recuerda que "el Granada era un equipo muy fuerte y duro en aquella época y los partidos en su campo eran muy peleados y aguerridos". Nos dieron mucha guerra al tener una defensa muy fuerte y ser peligrosos también en ataque, pero nosotros teníamos un equipo francamente bueno, con una buena mezcla de juventud y veteranía, y creo que les superamos merecidamente". "A ver si este año se repite la misma historia y volvemos a ganarles. Será también difícil, pero el espíritu que tiene el Athletic es bueno, seguro que darán la cara y me agradaría ver una final vasca", finaliza Clemente.

UNA PLAZA ADVERSA En caso de atender a los resultados firmados por los leones en sus 23 visitas oficiales al Granada, los números reflejan que son seis victorias, nueve empates y ocho derrotas las que acumula el Athletic en feudo nazarí, donde venció 1-2 en su última aparición en septiembre de 2016 con goles de Raúl García y Aymeric Laporte.