LEZAMA. Aritz Aduriz, quien dentro de una semana cumplirá 39 años de edad, dejó entrever este martes en Lezama un próximo adiós a su carrera profesional, desvelando que la lesión de cadera que sufre, y de la que reapareció el domingo tras tres meses de baja, "no se va a curar" y la llevará "después del fútbol".

"No es fácil que sepas que una lesión curar no se va a curar. La voy a llevar después del fútbol, pero lo que quiero es llevarla siendo competitivo para poder ayudar dentro del terreno de juego", dijo, "muy ilusionado" con el partido de Copa del jueves ante el Barcelona en San Mamés.

Aduriz reconoció que "mentalmente no es fácil" llevar una lesión así, un entorsis de cadera. "Te ves que quieres ayudar dentro del campo y no puedes hacerlo. Es una situación diferente a la que estaba acostumbrado, pero eso es enriquecedor porque de todas las situaciones aprendes", explicó.

"Me gustaría decir que estoy mejor, pero por lo menos voy a intentar ayudar. A ver si puedo hacerlo", siguió reflexionando sobre una lesión que "te limita en muchas cosas" porque "la cadera está en el centro de todos nuestros movimientos".

"Tienes que convivir con limitación y dolor. Hay momentos en los que estoy mejor y momentos en los que estoy peor", dijo el ariete internacional, quien termina contrato con el Athletic al final de la presente temporada, el 30 de junio de 2020. EFE